Sonnenholzner: «A esos delincuentes los espera un hoyo oscuro»

El candidato presidencial Otto Sonnenholzner cierra su campaña electoral con un mitin, hoy en Guayaquil (Ecuador). EFE/Mauricio Torres

En medio de un fuerte contingente de seguridad privada, el candidato a la Presidencia de Ecuador Otto Sonnenholzner llegó este jueves hasta un coliseo en Guayaquil para el cierre de su campaña electoral, en donde aseguró que tiene un «proyecto de país» para «devolver la paz» en Ecuador.

«Aquí hay un ecuatoriano que está aquí por las razones correctas, aquí hay un ciudadano que está aquí porque sabe cómo hacerlo, y aquí hay un grupo de gente que ha dado un paso al frente porque sabe que falta mucho para hacer y no hay tiempo que perder», dijo Sonnenholzner, quien fue vicepresidente entre diciembre de 2018 y julio de 2020.

En la tarima instalada en el sitio del cierre de campaña, donde antes de su llegada un cantante animaba a los asistentes, estuvo presente su esposa y también su candidata a vicepresidenta Erika Paredes, a quien denominó como «una de las mujeres más preparadas y con mayor experiencia que tiene Ecuador».

En su discurso, en su mayoría dedicado a la crisis de seguridad que vive Ecuador, Sonnenholzner agradeció a sus compañeros candidatos a la Asamblea Nacional por asistir al evento, pese a que, dijo, han «recibido amenazas y han querido ser extorsionados».

«Están aquí con nosotros como muestra de su compromiso con nuestro país. Eso es lo que necesitamos», insistió.

Esta campaña presidencial y legislativa se ha desarrollado en el momento más violento de la historia del país, y en el que varios candidatos y políticos han sido víctimas de ataques violentos, como el aspirante a la Presidencia Fernando Villavicencio, quien fue asesinado el pasado 9 de agosto a la salida de un mitin político en Quito.

Seguridad redoblada

Tras el crimen de Villavicencio, los otros «presidenciables» han redoblado su seguridad, han suspendido eventos y caravanas o han realizado mítines con una cantidad reducida de asistentes de cara a las elecciones extraordinarias de este domingo 20 de agosto.

Como medida «urgente» para frenar esa ola de violencia, Sonnenholzner afirmó que reforzará a la Policía, que actualmente «está abandonada». «No tienen ni para el rancho ni para el colchón para dormir. No tienen ni chaleco ni pistola ni patrullero», agregó.

«A esos delincuentes los espera un hoyo oscuro donde van a cumplir una pena de verdad porque si no hay justicia, jamás habrá paz. Vamos a trabajar para que en este país tengamos justicia para recuperar la paz», mencionó.

El político, apoyado por los partidos SUMA (centroderecha) y AVANZA (centroizquierda), también prometió que el país «va a salir de ese hueco» y de «esta crisis política que nos cuesta 80 millones de dólares» (el presupuesto de los comicios), dinero con el que, afirma, el Gobierno podría recuperar todo el sistema penitenciario y construir dos hospitales.

«Hospital como el que no tuvimos en Quinindé para atender a Rider», en referencia a Rider Sánchez, candidato de su partido a la Asamblea que fue asesinado el pasado 16 de julio en la provincia de Esmeraldas, fronteriza con Colombia.

Derecho a vivir en paz

Sonnenholzner cerró su discurso asegurando que él y su equipo están «listos, ansiosos y con ganas» de cambiar la situación del país. «Es urgente que luchemos por el derecho que nos han arrebatado, el derecho a vivir en paz, con plata y con progreso, aquí en nuestra propia tierra», aseveró.

Y prometió «recuperar la seguridad» y reactivar la economía para evitar que el país «que nos vaya de las manos».

Sonnenholzner es uno de los ocho candidatos que optan a suceder al actual presidente, el conservador Guillermo Lasso, y completar el periodo 2021-2025, interrumpido en mayo, cuando el mandatario invocó el mecanismo constitucional de la «muerte cruzada» para disolver la Asamblea Nacional, dominada por la oposición, en el momento que se disponía a votar su destitución. EFE (I)

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