
Para las 08:30 de este 22 de septiembre de esta año, esta convocada la audiencia para decidir si dos vocales del Consejo de la Judicatura (CJ) son citados a juicio. En caso de que eso suceda, Maribel Barreno y Juan José Morillo tendrían que abandonar sus cargos.
Walter Macías, juez de la Corte Nacional de Justicia, llamó a esta diligencia que es parte del proceso legal que enfrentan ambos vocales y también Vladimir Jhayya, juez de Pichincha, por supuesto trafico de influencias.
El juez Macías se reincorporó al cargo luego de que la jueza Martha Vimos aceptara su acción de protección en contra de la resolución con la que la Judicatura los destituyó del puesto. Ya que con los votos de Wilman Terán, presidente de la Judicatura, y del vocal Xavier Muñoz, se optó por sacarlo del puesto.
El Telégrafo informa que la audiencia que está programada para esta mañana es primordial porque, de acuerdo al Código Orgánico de la Función Judicial, hay una inhabilidad para ejercer el cargo si un funcionario ha sido convocado a juicio.
Dicha Ley establece que no puede ser nombrado ni desempeñar un cargo o puesto en la Función Judicial: “Quien hubiese sido llamado a juicio por delito reprimido con prisión o reclusión, por providencia ejecutoriada, mientras no haya sido absuelto”.
Por tal motivo, si la resolución de hoy establece su llamamiento a juicio, Barreno y Morillo tendrían que dejar la Judicatura en lo que se resuelve su caso. Eso conlleva un proceso legal que puede llegar hasta la casación. La separación del puesto sería definitiva si la sentencia se halla ejecutoriada.