El Ministerio de Defensa de Rusia eludió hoy comentar en su parte de guerra el hundimiento del buque de desembarco Caesar Kúnikov de la flota del mar Negro, reivindicado por Ucrania, pero sí informó de avances de sus tropas en el este de Ucrania.
Según el parte diario de los militares rusos, sus fuerzas mejoraron posiciones en los frentes de Donetsk y Lugansk, regiones que Rusia anexionó en septiembre de 2022, pero no controla en su totalidad.
Las pérdidas de las Fuerzas Armadas ucranianas en un día superaron el millar de efectivos, según Defensa.
Además, durante la última jornada fueron derribados 98 drones ucranianos en las regiones de Donetsk, Lugansk y Jersón.
Mientras, en la región de Zaporiyia, vecina de Jersón, fue destruido un helicóptero Mi-24 de la Fuerza Aérea ucraniana, agrega el parte ruso.
El buque de desembarco ruso Caesar Kúnikov, hundido este miércoles cerca de las costas de la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014, es el segundo barco de guerra que pierde en el mar Negro en las últimas dos semanas.
El Caeser Kúnikov, construido en los astilleros de Gdansk (Polonia) y botado en 1986 (aún en la época soviética), era un buque de desembarco de 112,5 metros de eslora, 15 metros manga y que podía alcanzar una velocidad máxima de 17,5 nudos.
Este buque formaba parte del llamado ‘Proyecto 775’, del que se construyeron 28 unidades entre 1974 y 1991, cuando se disolvió la Unión Soviética.
Según la inteligencia militar ucraniana, GUR, el buque fue hundido con drones navales y murió la mayoría de sus tripulantes. EFE (I)