La Policía detuvo a dos hombres por pornografía infantil

Durante el operativo, la Policía Nacional identificó y rescató a 34 adolescentes víctimas en Imbabura y Cotopaxi. Los capturados, de 22 y 29 años, tenían más de 3 000 archivos audiovisuales.

La Policía Nacional atrapó a dos sujetos de 29 y 22 años de edad que eran líderes de una red de pornografía infantil, que operaba desde Atuntaqui, Cotopaxi, Imbabura y Latacunga.

Ellos procesaban y vendían material ilegal de niñas y adolescentes. La investigación comenzó hace un año cuando una adolescentes fue detenida, quien fue acusada por otras menores de reclutarlas y convencerlas que formen parte de un aparente trabajo bien pagado.

De acuerdo con la Policía Nacional, las redes de reclutamiento fueron creadas en los colegios y eran tan discretas que pudieron pasar desapercibidas. Luego amenazaban a sus víctimas para someterlas y obligarlas a permanecer en la organización.

«Captaban la atención de muchachas con ofrecimientos falsos, como pagos, celulares y objetos de interés para las adolescentes. Eran captadas, y luego se producían los intercambios de material pornográfico», indicó un vocero de la Policía.

Los capturados, Stalyn P. y Jhonatan A., son de nacionalidad ecuatoriana y no tienen antecedentes penales. Los agentes rescataron e identificaron 34 jóvenes víctimas de esta red, que tenían entre 13 y 14 años.

Entre las evidencias hay una cámara fotográfica, once celulares, una laptop, seis tarjetas SIM, un dispositivo de almacenamiento, y más de 3 000 archivos con material de abuso infantil, que será parte de la investigación de este caso.

Según Ecuavisa, estas intervenciones fueron coordinadas con la Embajada de Estados Unidos en Ecuador, el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, la organización OUR Rescue, y la Fiscalía General del Estado, entidad que indicó que a los capturados se les formularán cargos por comercialización de pornografía con utilización de niños, niñas y adolescentes.

De acuerdo con el Código Orgánico Integral Penal (COIP), este crimen tiene de 10 a 13 años de prisión.

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