
Cinco personas fueron asesinadas el 14 de julio dentro de una residencia del cantón Santa Rosa, en la provincia de El Oro, donde funcionaba un bar informal. El crimen múltiple sucedió en la ciudadela Reina del Cisne pasadas las 15:00.
De acuerdo con información preliminar, cuatro tipos que se transportaban en dos motos llegaron a la residencia y abrieron fuego contra los ciudadanos que estaban dentro.
Juan Pablo Calva, teniente coronel de la Policía Nacional, confirmó a medios locales que no hubo heridos en este atentado.
Militares, policías y agentes del Laboratorio de Criminalística acudieron a la escena del crimen para levantar los indicios y recoger los cuerpos, que fueron llevados a la morgue de Machala.
Entre los últimos sucesos violentos suscitados en el Ecuador consta también una balacera en Manta. Dos sujetos fueron asesinados y otros cinco salieron heridos la noche del 13 de julio en el barrio El Progreso, perteneciente a la parroquia Eloy Alfaro.
Desde inicios del 2024, Daniel Noboa, presidente de la República, elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de conflicto armado interno, con el que pasó a catalogar a las bandas criminales como grupos terroristas y actores beligerantes no estatales.
Según Ecuavisa, a las bandas del crimen organizado, dedicadas mayormente al narcotráfico, se les atribuye la ola de violencia que azota al Ecuador y que le ha llevado a figurar como el país con más homicidios per cápita, al registrar 47,2 por cada 100 000 habitantes en 2023, de acuerdo con el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO).