
La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, que beneficia a 1’100.000 habitantes del sur, centro y suburbio oeste de Guayaquil, no solo es pionera en Ecuador de innovación tecnológica en el tratamiento de las aguas residuales, sino que aporta en temas de trabajo, soberanía alimentaria y salud pública, porque estos modernos procesos cuidan que estas especies que son típicas de la alimentación guayaquileña no lleguen con cargas contaminantes.
Es importante señalar que las aguas que la PTAR Las Esclusas descarga al río Guayas, luego desembocan en el Golfo de Guayaquil, el lugar de donde provienen los alimentos que forman parte de la dieta de los guayaquileños y aparte es el sustento económico de muchos otros guayaquileños que se dedican a la pesca blanca, recolección de crustáceos y conchas, etc.
Además, el Golfo de Guayaquil es uno de los humedales más grandes del país, tiene un área protegida de vital importancia como es la isla Santay, y un sin número de especies de flora y de fauna acuáticas que habitan en estos ecosistemas, y que están siendo preservado a través de Las Esclusas.
La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Las Esclusas es un ejemplo de sostenibilidad ambiental y un paso significativo hacia un futuro más limpio y saludable para Guayaquil y sus habitantes.