Una gasolinera de la compañía Copedesa fue clausurada durante la tarde del pasado jueves en Guayaquil. La estación de servicio, que mantiene vínculos con la familia del alcalde de la ciudad Aquiles Álvarez, habría infringido el Código Orgánico Ambiental (COA).
Tras la clausura, Álvarez recurrió a la red social X para publicar varios mensajes sobre la «fuerza» de Guayaquil. «Nosotros seguimos adelante, Guayaquil seguirá en marcha, siempre!! Créanme que nada nos afecta, aunque quieran quebrarnos, más fuertes nos ponen», escribió.
Aunque no hizo mencionó explícitamente a la estación de servicio, el alcalde incluyó un mensaje político, diciendo «esto es una lucha entre el bien y el mal y ojo, siempre gana el bien! Voten bien».
El pasado julio, la compañía Copedesa fue mencionada en una denuncia del Gobierno del Ecuador que investiga un presunto tráfico de combustibles.
Según un comunicado emitido por la Agencia de Control y Regulación Hidrocarburífera (ARCH), la entrega de combustible a las distribuidoras asociadas a Copedesa será suspendida por el supuesto desvío de diésel subsidiado a «segmentos no autorizados». (I)
