
El primer ministro francés, Michel Barnier, ha recurrido a poderes extraordinarios para acelerar un proyecto de ley de presupuesto de seguridad social sin someterlo a votación en el parlamento, una acción que se espera provoque una moción de censura contra su gobierno minoritario, este lunes, 2 de diciembre.
Es improbable que el gobierno sobreviva a la votación, que el partido de izquierda radical Francia Insumisa (LFI) ha anunciado que presentará esta tarde, y que podría celebrarse el miércoles.
El partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen ha manifestado que respaldará la votación.
A pesar de las concesiones de última hora, Barnier claramente no consideraba viable sacar adelante su propuesta de presupuesto.
El Nuevo Frente Popular, una coalición de varios partidos de izquierda, superó tanto a los seguidores de Macron como a la extrema derecha en las elecciones anticipadas de julio.
La coalición expresó su enojo por la decisión de Macron de girar hacia el centroderecha al designar a Barnier como primer ministro, y prometió oponerse al gobierno.
Esto ha obligado a Barnier a depender hasta ahora del apoyo de la RN para mantener su gobierno.
Utilizó el artículo 49.3 de la Constitución francesa, que permite aprobar un proyecto de ley sin votación, para avanzar con el presupuesto de 2025, después de que la RN se uniera a la izquierda para oponerse a él.
«No creo que los franceses nos perdonen por elegir los intereses partidistas por encima del futuro del país», refutó Barnier a los parlamentarios el martes al explicar las razones de su decisión. «Ahora, cada uno tendrá que asumir su propia responsabilidad como yo he asumido la mía».
Marine Le Pen explicó la postura de la RN: «Barnier no escuchó a los 11 millones de votantes de la RN… Dijo que cada uno debe asumir su propia responsabilidad, y eso es lo que haremos».
Barnier fue invitado a formar gobierno por el presidente Emmanuel Macron en septiembre.
Si Barnier no supera la votación del miércoles, permanecerá como primer ministro interino hasta que Macron designe un nuevo gobierno.
Este podría ser un gobierno mayoritario, aunque es poco probable debido a la fragmentación del parlamento, o un gobierno tecnocrático, que gestionaría el país hasta que se puedan convocar nuevas elecciones el próximo verano.
Varios partidos también exigen nuevas elecciones presidenciales. Según la situación actual, Macron permanecería en el cargo hasta 2027. (I)
David Josue Quispe Franco.