
Las autoridades guatemaltecas informaron este lunes que detectaron matrimonios forzados entre los menores que fueron rescatados el pasado 20 de diciembre de la secta ultraortodoxa Lev Tahor.
El titular de la Procuraduría General de la Nación (PGN), Julio Saavedra, explicó este lunes en una rueda de prensa que tres menores de edad, entre ellos un adolescente de 17 años, fueron obligados a casarse y recibieron amenazas para no denunciar lo sucedido.
De acuerdo con el funcionario, este fin de semana activaron 12 alertas sobre menores desaparecidos y se suma a las siete que ya estaban activas desde que se iniciaron las investigaciones contra esta secta.
Por el momento, el Estado tiene a su cargo a 135 menores que fueron separados de la secta el pasado 20 de diciembre, cuando vivían en una comunidad ubicada en Santa Rosa, una provincia del sureste del país centroamericano.
La Fiscalía guatemalteca investiga casos de violaciones sexuales, embarazos forzados y otra serie de delitos que habrían sido cometidos en contra de los menores.
El pasado 3 de enero, las autoridades guatemaltecas capturaron a uno de los líderes de Lev Tahor, identificado como Emmanuel Cardona, quien intentó salir del país rumbo a El Salvador. El ente investigador guatemalteco acusa a Cardona de violación y otros delitos.
La PGN detalló que este fin de semana entregaron citaciones a los padres de los menores que han sido separados para indagar más sobre la situación y determinar el futuro de los niños.
Lev Tahor o ‘corazón puro’ en hebrero, fue fundada en Jerusalén en 1988 por el rabino Shlomo Helbrans y llegó a Guatemala en 2011.
La secta también se asentó en otros lugares como Brooklyn, Estados Unidos, donde enfrentaron múltiples acusaciones de abuso infantil, pedofilia, secuestros y otros delitos contra menores.
Desde 2016, diversas comunidades de Guatemala han rechazado la presencia de Lev Tahor y denunciado prácticas contra menores. Sin embargo, no fue hasta el pasado diciembre que una investigación penal elevó las acusaciones y enfrentó a la secta ante las autoridades guatemaltecas. EFE (I)