
Tres personas han sido asesinadas (un hombre, una mujer y un niño) en una balacera ocurrida alrededor de las 17h00 de este viernes 14 de marzo, cuando sicarios que iban en un vehículo han disparado contra un vehículo blanco, marca KIA, que circulaba en el kilómetro 13,5 de la avenida León Febres Cordero, vía principal de La Aurora, cantón Daule.
Versiones no confirmadas, citadas por Extra, dicen que hay otros tres heridos (dos de elloso menores de edad, y un hombre adulto) que iban también en el vehículo. Hasta la noche no se había identificado a las víctimas.
El hombre que murió era el conductor del carro. La mujer y el niño iban en el asiento de atrás. Testigos citados por la cadena Ecuavisa aseguran que los criminales usaron un fusil para el ataque. Dispararon quince veces contra el vehículo.
La Policía ha dicho que el carro atacado iba desde La Puntilla hacia la vía a Daule, cuando repentinamente recibió los impactos.
Familiares de las víctimas tardaron casi dos horas en llegar tras sucitarse la tragedia, debido a la congestión vehicular en la zona. Extra relata que mostraron conmoción por el ataque a sus familiares y se abrazaron en la escena mientras los agentes de Criminalística levantaban evidencias.
Personal de la Policía Nacional y de la Comisión de Tránsito del Ecuador llegaron hasta el lugar para realizar las investigaciones debidas.
La tragedia provocó una monumental congestión vehicular que afectó a cientos de conductores que iban por esa carretera.
La ola de violencia criminal que vive Ecuador llevó al país andino a situarse en 2023 a la cabeza del índice de homicidios en Latinoamérica, mientras que en este inicio de 2025 está marcando las peores cifras de su historia desde que se tiene registro, con un promedio de un asesinato por hora en enero.
Desde inicios de 2024 el país está bajo «conflicto armado interno» contra el crimen organizado declarado por su presidente, Daniel Noboa, quien además ha decretado una serie de sucesivos estados de excepción para elevar la lucha contra estas estructuras criminales, a las que ha clasificado como grupos «terroristas».
Estas bandas criminales, dedicadas principalmente al narcotráfico, las extorsiones, los secuestros y la minería ilegal, entre otras actividades ilícitas, cuentan en algunos casos con vínculos con carteles mexicanos como los de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, así como con algunos grupos disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)
