
Un juez ha legalizado la captura, en Bogotá, de William Fernando González Cruz, alias «El Hermano», cuarto detenido por el atentado contra el precandidato presidencial y senador colombiano Miguel Uribe Turbay. Se le atribuye haber organizado el plan de fuga para los sicarios involucrados en el ataque contra el senador.
González Cruz tiene antecedentes penales por hurto calificado agravado y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego o municiones.
Ahora, será imputado por los delitos de tentativa de homicidio, porte ilegal de armas de fuego y uso de menores en la comisión de delitos, ya que el autor de los disparos a Miguel Uribe fue un joven de 15 años.
Había sido retenido hace algunos meses en el norte de Bogotá conduciendo un vehículo sin placas en actitud sospechosa, pero a pesar de sus antecedentes, las autoridades solo le impusieron una multa y lo dejaron libre, reveló el diario El Tiempo.
«El Hermano» habría sido contactado por alias «El Costeño», quien, según los testimonios, fue uno de los cerebros del atentado a Miguel Uribe. Este delincuente sigue huyendo.
La Fiscalía sostiene que «El Costeño» habría sido quien reclutó, además, a Katherine Andrea Martínez Martínez, alias «Gabriela», de 19 años, y a Carlos Eduardo Mora González, quienes también están capturados. Al parecer, les ofreció 5 millones de pesos por participar en el plan criminal. La investigación judicial indica que la mujer contactó al joven sicario y, al parecer, le prometió 20 millones de pesos para cometer el atentado.
Cuarto detenido
Por este atentado antes ya han sido detenidas tres personas, aunque medios locales. Minutos después del ataque fue detenido el pistolero, un menor de 15 años que tenía en su poder una pistola de marca Glock usada en el atentado, y la semana pasada la Fiscalía presentó a otros dos presuntos implicados, Carlos Eduardo Mora y Katerine Martínez, en calidad de «coautores».
Distintos medios locales han difundido imágenes de la captura ayer en Bogotá de un hombre identificado como William Fernando Cruz, apuntado como el cuarto presunto implicado en el atentado, sobre lo cual ninguna autoridad se ha pronunciado oficialmente.
Mientras tanto, Uribe Turbay «sigue luchando por su vida», según expresó ayer su esposa, María Claudia Tarazona, en un mensaje en el que agradeció al equipo médico por «el esfuerzo titánico por mantener con vida a Miguel», por quien decenas de personas hacen vigilia permanente frente a la clínica desde el día del atentado.
- Con reportes de EFE.
