
Cinco hombres fueron asesinados este sábado en el interior del vehículo en el que viajaban en la localidad costera de Crucita, ubicada en el municipio de Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, al oeste de Ecuador.
De acuerdo con las primeras indagaciones, los hombres, que se movilizaban en un automotor de color gris, fueron interceptados por otros individuos que les dispararon en múltiples ocasiones en un ataque fulminante.
El ataque armado conmocionó a los habitantes de la localidad, hasta donde llegó la Policía para iniciar las investigaciones y determinar el motivo del crimen.
En redes sociales empezaron a circular varios videos que dan cuenta del múltiple homicidio.
El coronel Wladimir Acurio, jefe policial de la zona, dijo que los atacantes se movilizaban en otro vehículo y que investigan si un automóvil abandonado muy cerca de la escena del ataque está relacionado con el hecho.
Manabí es una de las cuatro provincias que está bajo el estado de excepción decretado a inicios de mes por el presidente, Daniel Noboa, debido a los altos niveles de violencia registrados.
Entre enero y julio de este año, en Manabí se han contabilizado 703 homicidios de los 5.268 computados a nivel nacional.
A mediados de julio, 2.000 militares fueron enviados a esa provincia después de que se registraran al menos quince asesinatos en doce horas, en un repunte de violencia atribuido a un enfrentamiento entre Los Choneros y Los Lobos, las dos bandas criminales más poderosas del país.
La disputa entre estos grupos se dio a raíz de la recaptura en esa provincia del narcotraficante José Adolfo Macías Villamar (alias ‘Fito’), líder de Los Choneros y quien fue extraditado ese mismo mes a Estados Unidos, donde enfrenta cargos por conspiración para la distribución internacional de cocaína, uso de armas de fuego y contrabando de armas de fuego desde EE.UU., entre otros delitos.
Ecuador vive desde 2024 bajo un estado de «conflicto armado interno» declarado por Noboa para combatir a las bandas del crimen organizado, dedicadas principalmente al narcotráfico, y a quienes se les atribuye la escalada de violencia que registra el país andino en los últimos años, que lo ha llevado a estar a la cabeza del índices de homicidios en Latinoamérica. EFE