
El movimiento Revolución Ciudadana (RC), cuyo líder es el expresidente ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017), tildó este lunes de una «farsa mediática» al denominado Cartel de los Soles que el Gobierno de Estados Unidos asegura que lidera el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Correa se encuentra prófugo de la justicia, presuntamente en Bélgica, tras ser encontrado culpable en tres instancias de liderar una banda que exigía sobornos a empresas constructoras, entre ellas la brasileña Odebrecht, durante sus tres mandatos.
El correísmo aseveró en un comunicado que la Administración de Donald Trump se ha «inventado» esta acusación contra Maduro, sobre el que la Fiscalía estadounidense ha elevado la recompensa por su captura a 50 millones de dólares, para «justificar sanciones e intervenciones» y «atacar a gobiernos soberanos» en América Latina.
La RC rechazó la «injerencia extranjera en asuntos soberanos de América Latina» y criticó que Estados Unidos esté utilizando un «discurso» de lucha contra el narcotráfico cuando ese país, «con todo su poderío tecnológico, radares, satélites y sistema de vigilancia global» no logra «o no quiere» controlar sus propias fronteras y territorios, «que siguen siendo el principal destino del narcotráfico mundial».
«Se habla de combatir al narcotráfico, pero la evidencia muestra otra cosa: la droga se produce mayoritariamente en Colombia, país que alberga siete bases militares de Estados Unidos supuestamente destinadas a frenar este flagelo. Sin embargo, la producción continúa y los envíos ilícitos no se detienen», señaló el movimiento político.
Correa dice que droga sale en barcos bananeros
En Ecuador, «los cargamentos de droga salen incluso desde puertos privados camuflados en exportaciones de banano, ¿por qué no se controla? ¿A quién beneficia? Su silencio y pasividad los convierte en cómplices de aquello que dicen combatir», cuestionó el correísmo.
Además, aseguró que «el mundo entero conoce los nombres de expresidentes de Estados Unidos vinculados al consumo de drogas, así como expresidentes latinoamericanos relacionados con escándalos financieros y de corrupción».
«Se erigen como jueces mientras son parte del problema que dicen combatir», añadió.
El correísmo, aliado de Maduro, aseguró que no se busca «combatir las drogas, sino controlar recursos estratégicos». «Lo demuestran con Venezuela: detrás de las acusaciones y montajes, lo que realmente quieren es apropiarse del petróleo venezolano», mencionó la RC.
«¡Basta de injerencia! ¡Basta de hipocresía! América Latina merece respeto y autodeterminación. ¡Estados Unidos, saque sus manos de nuestra región, saque las manos de Venezuela!», exigió.
Este comunicado llega después de que el pasado sábado, Luisa González, excandidata presidencial del correísmo y presidenta del movimiento, señalara en una reunión con migrantes en Suiza que supuestamente se está buscando vincularla a ella y al expresidente Correa con el Cartel de los Soles, con el objetivo de perseguirlos y encarcelarlos.
Luisa dice que la persiguen
«Ya están diciendo que a Luisa González la financió Maduro. Cincuenta millones de dólares, supuestamente. ¿Cómo los hicieron llegar? ¿Cómo nadie se dio cuenta?», ironizó, en referencia a la campaña electoral de las recientes elecciones presidenciales donde Noboa se impuso a González en la segunda vuelta.
«Pero, ¿cuál es la historia ahí? Querernos vincular a nosotros para podernos perseguir y encarcelar. Y probablemente quieran sentenciar a Rafael Correa, quieran procesarlo, y quieran encarcelarme a mí. Y yo les digo: mi vida por mi patria y por este proyecto», añadió González.
El pasado 14 de agosto, el presidente Noboa declaró al Cartel de los Soles como grupo terrorista con incidencia en suelo ecuatoriano y ordenó al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) analizar su influencia dentro de las bandas criminales a las que el mandatario le declaró la «guerra» desde inicios de 2024.
Ecuador fue el segundo país en catalogar al Cartel de los Soles como organización terrorista, poco después de que el Gobierno de Donald Trump hiciese lo propio. EFE
