Ecuador registró un total de 71,6 millones de dólares en gasto turístico durante el feriado nacional de cuatro días por el Día de los Difuntos y la Independencia de la ciudad andina de Cuenca, un incremento del 16,3 % con respecto al mismo periodo del 2024, cuando el gasto fue de 61,6 millones de dólares.
Así lo aseguró este miércoles la portavoz del Gobierno, Carolina Jaramillo, en su rueda de prensa semanal, en la que destacó que los datos reflejan una «reactivación sostenida del turismo interno» y «el fortalecimiento de los destinos locales», después de las manifestaciones indígenas que se registraron entre septiembre y octubre tras la eliminación del subsidio al diésel, que tuvieron como epicentro a la provincia andina de Imbabura,
Jaramillo también aseguró que durante este feriado, del 1 al 4 de noviembre, el país registró una ocupación hotelera promedio de 44,1 %, lo que representa un crecimiento de 11,6 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo de 2024, cuando se registró un 32,5 %.
Las provincias que tuvieron los niveles más altos de ocupación hotelera fueron la sureña Azuay, con el 74,1 %; la amazónica Napo, con 70,4 %, y la andina Tungurahua, con el 66,9 %.
En el caso de Imbabura, donde se concentraron las protestas que duraron un mes y que mantuvieron aislada a la provincia, la ocupación hotelera fue del 33,4 %, lo que supera el 31,7 % que hubo en 2024; y tuvo un gasto estable de 1,84 millones de dólares, según Jaramillo.
El número de viajes turísticos a nivel nacional también aumentó, pasando de 962.000 en 2024 a 1,1 millones en 2025, lo que representa un crecimiento del 14,6 %. Es decir, 140.000 viajes adicionales, puntualizó la portavoz.
Tras el fin de las protestas, el Gobierno inició una campaña de reactivación a negocios, especialmente en Imbabura, Carchi y algunas localidades del norte de la provincia de Pichincha, que fueron las que sufrieron mayores estragos por los cierres de carreteras y los enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad.
Una de las medidas tomadas por el Ejecutivo fue la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) durante los cuatro días, que pasó de 15 % a 8 % en estas zonas, con el objetivo de incentivar el turismo.
Las manifestaciones, que terminaron el pasado 22 de octubre, dejaron dos muertos, producto de disparos de armas de fuego, y cerca de 300 heridos, de acuerdo a cifras de organizaciones defensoras de derechos humanos, además de 142 personas detenidas, según el Ministerio del Interior. EFE (I)
