El antidiabético ozempic, conocido por su uso como adelgazante, se convirtió en 2024 en el fármaco en el que más invierte el Sistema Nacional de Salud español, después de que el gasto se disparase hasta los 403,9 millones, un 36,2 % respecto al año anterior.
Lo señala el informe ‘Prestación Farmacéutica en el Sistema Nacional de Salud (SNS) 2024’, publicado este jueves por el Ministerio de Sanidad de España, que sitúa el gasto farmacéutico en semaglutida, el principio activo de ozempic, como el de mayor impacto presupuestario para el sistema público del país.
En total, el gasto farmacéutico del Sistema Nacional de Salud a través de recetas médicas fue de 13.865 millones de euros el año pasado, 650 millones más que en 2023.
Aunque los principios activos más consumidos fueron el paracetamol, el omeprazol y el analgésico matamizol, la semaglutida se ha consolidado como el principio activo con mayor gasto en farmacia tras sucesivos incrementos en años anteriores: un 78 % en 2021, un 44,5 % en 2022 y un 42 % en 2023.
Ahora, con el incremento del 36,2 % en 2024, se coloca como el medicamento de mayor impacto económico dentro de la prestación farmacéutica pública.
Más conocida por el nombre comercial de ozempic, la semaglutida pasó a formar parte de la prestación farmacéutica pública española en 2019. También lo está su versión en comprimidos, denominada Rybelsus.
Aunque es más conocida por su uso como adelgazante, en España está financiada únicamente, y no en todas las presentaciones, para la diabetes mellitus tipo 2 en personas con obesidad con un índice de masa corporal igual o mayor de 30kg/m2 y en terapia combinada con otros antidiabéticos, incluyendo insulina, cuando estos, junto con la dieta y el ejercicio, no proporcionan un control glucémico adecuado. EFE (I)
