El presidente estadounidense, Donald Trump, felicitó la Navidad a todos «los sinvergüenzas que adoraban a Jeffrey Epstein«, que luego lo «abandonaron como un perro», y alegó que él fue el único que cortó con el pederasta antes «de que se pusiera de moda» y que el resto eran «todos demócratas».
«Feliz Navidad a todos, incluyendo a los muchos sinvergüenzas que adoraban a Jeffrey Epstein, le daban montones de dinero, iban a su isla, asistían a sus fiestas y creían que era el mejor tipo del mundo, solo para ‘abandonarlo como a un perro’ cuando la cosa se puso muy fea», dijo el republicano en un post publicado la noche del jueves en su cuenta de Truth Social.
En el post asegura que él «en realidad fue el único que abandonó a Epstein, mucho antes de que se pusiera de moda» y atacó a la «izquierda radical» como la verdadera aliada del convicto pederasta.
«Cuando sus nombres salgan a la luz en la actual cacería de brujas de la izquierda radical (…), y se revele que todos son demócratas, habrá que dar muchas explicaciones», alegó, lanzando una advertencia: «¡Disfruten de la que podría ser su última Feliz Navidad!».
Este miércoles, el Departamento de Justicia anunció que ha recibido de parte del FBI y de una fiscalía de Nueva York cerca de un millón de nuevos documentos presuntamente relacionados con el caso del pederasta Jeffrey Epstein, que ya están revisando para ser publicados.
Una ley aprobada por el Congreso el pasado noviembre obligaba a la Administración de Donald Trump a publicar el viernes 19 de diciembre toda la documentación no clasificada sobre el caso de Epstein, quien se suicidó en prisión en 2019.
El Departamento de Justicia, sin embargo, solo publicó ese día una parte de los archivos, incluidas varias fotos del expresidente demócrata Bill Clinton con Epstein, al argumentar que la cantidad de información era demasiado elevada y que necesitaba tiempo para revisar todo el contenido, algo que generó críticas de la oposición demócrata y de las víctimas.
En una nueva partida publicada el lunes, aparece repetidamente el nombre de Trump, quien habría viajado varias veces en el avión privado del magnate financiero, pero no hay pruebas de que participara en sus delitos sexuales.
Al principio, Trump no respaldó la publicación de los documentos de Epstein, con quien mantuvo una amistad hasta 2004, mucho antes de que fuera acusado de prostitución de menores, pero el mandatario tuvo que rectificar y firmar la ley tras comprobar el fuerte apoyo que ésta tuvo en el Congreso. EFE (I)
