ASUNCIÓN, 23 de septiembre (API).- Independiente del Valle fue eliminado de la Copa Sudamericana tras caer goleado en Asunción 3-0 frente a Cerro Porteño.
Un ecuatoriano más borrado de la Copa Sudamericana. Prometía Independiente en la previa. El equipo de Repetto había tenido varias buenas salidas como visitante en los anteriores compromisos internacionales, pero hoy fue la triste excepción. Se topó con un rival que le resultó enorme, mucho más cuando Daniel Angulo le echó un manotazo a Víctor Marecco que le costó la roja. Fea exhibición de los ‘Rayados’, que se regresan a Sangolquí con las manos vacías.
El partido arrancó con Cerro Porteño encima de Independiente. El partido era complicado para los dirigidos por Repetto que no alcanzaban a filtrar una sola contra para coquetear con el gol de visitante que les hubiera dado la mitad de la clasificación. Para colmo, Daniel Angulo salió expulsado a los 19 minutos y la historia quedó cuesta arriba.
A los 26 minutos, José Ortigoza marcó el primero tras un terrible error defensivo de Independiente que salió a marcar a contrapié un pelotazo cruzado. Nada qué hacer y resignación total. El partido siguió siendo completamente para los paraguayos, Repetto sacó a Sornoza y metió a Porta, se perdió un hombre de creación por una referencia que nunca llegó en el centro del área.
El segundo tiempo arrancó con el mismo semblante. Cerro se fue encima de Independiente y consiguió desequilibrar la serie a su favor con la incursión de Víctor Hugo Mareco que sorprendió nuevamente a una defensa distraída. El 2 a 0 liquidó a los del Valle que se deshizo ante un rival que lo ahogó y cambió rotundamente. Para rematar, el español David Güiza se mandó una sutileza y marcó el tercero tras un remate formidable en la orilla misma del área. Se acabó la lucha y, lo que vino, fue apenas un intento en vano y poco convincente de los de Repetto.
Se acabó el sueño de Independiente y habrá que seguir intentando. Será de ver cuáles serán los cambios que sufrirá la plantilla del equipo sangolquileño para el 2015, se va Jonathan González y varios más se anotan a la cola. Mucho que aprender tras una lección que exige una vuelta de tuerca.