Los impuestos para el sector automotriz no terminaría con el pago del tributos ambiental, según la propuesta presentada la semana anterior por el Servicio de Rentas Internas (SRI). Ayer, la ministra coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, dijo que se analiza otro tributo extra, según un informe publicado por el diario HOY.
La intención, según Cely , estaría enfocada a evitar «la transferencia de ventas de carros del consumidor a los oligopolios». La ministra afirmó que el mercado vive un buen momento, que se lo ve reflejado en la cantidad de carros en las calles e incluso habló de un crecimiento ordenado del sector.
El Gobierno, según la ministra, ha fomentado el esamblaje de automotores con los incentivos para la importación de (CKD), que son partes de carros. «Pero no vemos una reducción de precios que beneficie al consumidor», dijo ante casi 300 socios de la Cámara de Comercio de Guayaquil, e invitados especiales, entre ellos Jaime Cucalón, presidente de la Asociación Ecuatoriana Automotriz (AEA).
Cucalón decidió abandonar la reunión tras el nuevo anuncio de Cely. «Vamos a pedir una cita con ella. Queremos reglas claras y seguridad tributaria», dijo y precisó que esos anuncios impiden all empresario planificar sus inversiones y compras anuales.
Desde enero a abril de este año, existe una reducción del 18,8% en la importación de vehículos armados (CBU) y partes que llegan para el ensamblaje local es decir los CKD, recordó. «Primero se nos habló de cupos e impuestos, nos sacaron el tributo ambiental y ahora nos salen con esto», precisó antes de marcharse.
Según la reforma tributaria entregada la semana pasada por el director del SRI, Carlos Marx Carrasco a Carondelet, los autos pagarán un «impuesto verde»: proporcional al precio y al cilindraje, que puede ir de los $30 hasta los $5 000. La reforma fue anunciada a comienzos de año, pero se la puso en la «congeladora» por la consulta.