Washington, 11 may (EFE).- La ex secretaria de Estado de EE.UU. Hillary Clinton recuerda en un extracto de su próxima biografía publicado hoy con motivo del Día de la Madre a Dorothy Howell Rodham, la mujer que la trajo al mundo y la persona que más influencia tuvo en su vida.
«Nadie tuvo una mayor influencia en mi vida o hizo más para dar forma a la persona en la que me convertí», afirma la ex primera dama en el extracto de su biografía «Hard Choices» (Decisiones Difíciles) que adelanta hoy la revista Vogue y saldrá a la venta en junio.
Clinton, que se prepara para ser abuela en los próximos meses, describe a su madre como una mujer con una energía increíble, una persona positiva y muy independiente.
Amante de las novelas de misterio, la comida mexicana y el programa de televisión «Dancing with the Stars», la madre de Hillary se trasladó a vivir con ella poco antes de cumplir los 90 años.
«Cuando me convertí en secretaria de Estado mamá acababa de cumplir 90 años. Había estado viviendo con nosotros en Washington durante los últimos años desde que vivir en su apartamento con vistas al zoológico en la Avenida Connecticut se convirtió en demasiado para ella», recuerda Hillary Clinton.
«El tenerla tan cerca se convirtió en un gran respaldo para mí, sobre todo tras el difícil periodo que siguió al fin de la campaña de 2008», afirma Clinton, que perdió entonces el pulso por la candidatura demócrata con el actual presidente, Barack Obama.
El libro recuenta también la gran influencia que Dorothy Howell Rodham tuvo sobre su nieta Chelsea, única hija de Hillary y Bill Clinton y quien espera su primer hijo.
«Para Chelsea, su abuela fue una de las figuras más importantes de su vida», afirma Clinton, quien señala que la abuela animó a Chelsea a perseguir su pasión por la filantropía.
«No estoy segura de haber visto a mamá más feliz que el día de la boda de Chelsea», dice la ex secretaria de Estado.
La biografía recuerda la difícil infancia de Dorothy Howell Rodham, cuya niñez en la ciudad de Chicago estuvo marcada por el abandono y el trauma.
«Sus padres se peleaban a menudo y se divorciaron cuando ella y su hermana eran pequeñas», escribe Hillary Clinton, quien describe cómo las dos hermanas se desplazaron a California para vivir con los abuelos paternos después de que sus padres las abandonaran.
Tampoco encontraron allí el cariño que necesitaban y a los 14 años Dorothy Howell Rodham comenzó a trabajar de niñera con una familia amable que la animó a seguir sus estudios de secundaria.
«Cuando fui lo suficientemente mayor para entenderlo le pregunté cómo había sobrevivido al abuso y el abandono sin convertirse en una persona amarga», afirmaHillary Clinton. Su madre le respondió que gracias a la amabilidad que encontró en momentos críticos de su vida.
Hillary, que perdió a su padre en 1993, dice haberse apenado entonces por todas las cosas que no podría vivir para ver o hacer. Cuando falleció su madre en octubre de 2011 fue diferente: «Mamá vivió una vida larga y plena. Lloré no por lo que ella se perdería si no por lo mucho que la extrañaría yo».
En su opinión, una frase que describe la forma en la que su madre vivió su vida y la forma en la que a Hillary Clinton le gustaría vivir la suya es «he amado y me han amado, todo lo demás es música de fondo».
«Sé que si estuviera con nosotros nos estaría animando a (…) no dormirnos nunca en los laureles, a no tirar la toalla, a no dejar de trabajar nunca para hacer que el mundo sea un lugar mejor. Esa es nuestra tarea pendiente», concluye el extracto publicado hoy en el que parece el preludio de la campaña de Hillary por la Casa Blanca. EFE
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