Irán castigó con 50 latigazos a una bloguera

Somayeh Tohidloo, una bloguera iraní, fue castigada con 50 latigazos acusada de insultar al presidente Mahmoud Ahmadinejad, según reporta el sitio es.globalvoicesonline.org. En la blogósfera y redes sociales se sucedieron los mensajes de repudio

La propia bloguera iraní contó cómo había sido ejecutada, en la prisión Evin el 14 de septiembre, la sentencia de 50 latigazos. «Sean felices, ya que si lo que deseaban era humillarme, confieso que mi cuerpo entero está sufriendo por la degradación«, escribió en su sitio según informó Global Voices.

Somayeh Tohidlou es bloguera, feminista y activista política en Irán. Nació en enero de 1975, estudia para un PHD en Sociología en la Universidad de Teherán y trabajó en la campaña del opositor Hussein Mousavi durante las elecciones presidenciales de 2009. Fue encarcelada por integrar el movimiento de protesta masiva que denunció el fraude en esos comicios, donde Ahmadinejad logró su reelección. Luego fue liberada bajo fianza, pero la condena de azotes se mantuvo y fue ejecutada el pasado 14 de septiembre, provocando una cadena de repudio en las páginas de otros opositores.

Numerosas personas se han solidarizado con ella en su página de Facebook. Green City escribió: «Aquí está Irán, donde Somayeh Tohidloo, una graduada de doctorado, es azotada mientras un fraude de 3 billones de dólares -en referencia al Lago Urmia, reserva de biósfera contaminada- sucede sin que nada se haga por castigar los actos fraudulentos». Otro bloguero iraní, Gomnamian, confesó que se horrorizó «de ver a un ser humano azotado por escribir un post sobre un criminal».

Mohammad Ali Abtahi, ex asesor del ex mandatario Mohammad Khatami, puso: «Cualquiera que la conozca la considera un símbolo de razonamiento, moderación y carácter. Hoy, cuando supe que recibió 50 latigazos por haber insultado al ‘muy respetable presidente’, sentí que fue el orgullo iraní el que había sido flagelado«.

El régimen iraní encarceló a varios blogueros en los últimos años. Omid Reza MirSayafi, uno de los más influyentes, murió en prisión el 18 de marzo de 2009 bajo circunstancias sospechosas.

 

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