Italia aumentará los impuestos sobre la producción y el consumo de bebidas alcohólicas, como la cerveza, y modificará las recaudación por los juegos de azar para financiar la estabilización del personal educativo y la contratación de unos 10.000 trabajadores para la escuela pública.
Esto es lo que prevé una enmienda introducida en la Comisión de Asuntos Constitucionales e Industria de la Cámara de los Diputados (baja) al decreto de simplificación normativa en la Administración Pública, aprobado por el Gobierno de Mario Monti hace unas semanas en Consejo de Ministros.
La enmienda, de la que hoy informó su promotor, el Partido Demócrata (PD) de centroizquierda, prevé que con ese aumento de los impuestos sobre la «cerveza, los productos alcohólicos intermedios y el alcohol etílico» se recauden 100 millones de euros más al año a partir de este 2012.
A esa cantidad, se habrán de añadir los, como mínimo, 250 millones de euros anuales que prevén recaudar a través de los cambios en el sistema impositivo a los juegos de azar, unos ingresos todos que permitirán garantizar la estabilización de la situación laboral del personal educativo al menos durante los próximos tres años.
Esta enmienda al decreto de simplificación administrativa pretende poner fin a los recortes del personal del sistema educativo público italiano determinados por el anterior Gobierno, que presidía Silvio Berlusconi, bloqueando las disposiciones en este sentido.
«Se añaden 10.000 puestos (de trabajo) para actividades de recuperación, integración y apoyo a los alumnos con necesidades educativas especiales, también para extender los horarios escolares, con una particular atención a la educación primaria y secundaria», explican en una nota Manuela Ghizzoni y Francesca Puglisi, del PD. EFE