México y Estados Unidos, ante el reto de encontrar el botín del Chapo Guzmán

El Chapo.

Después de que la justicia estadounidense condenara a cadena perpetua al capo mexicano Joaquín «el Chapo» Guzmán, surgen dos interrogantes: ¿dónde está y a qué país pertenece su gran fortuna?

Según expertos consultados por Efe este jueves, el proceso será largo porque no hay muchos indicios del paradero del dinero y de dónde se encuentran los 12.666 millones de dólares que el juez que condenó al exlíder del cártel de Sinaloa le pide como compensación por traficar con miles de toneladas de drogas hacia Estados Unidos.

La Fiscalía estadounidense calculó que esta ingente cantidad corresponde al trafico de 528.276 kilos de cocaína, 202 kilos de heroína y 423.000 kilos de marihuana.

Según indicaron los expertos, una vez hallada la fortuna, tocará decidir quién se queda con la mayor parte del botín: México o Estados Unidos.

El presidente Andrés Manuel López Obrador apuntó este jueves en una conferencia de prensa que «los bienes le corresponden a México legalmente y se va a revisar el asunto».

En cambio, el profesor e investigador en la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey, Juan Carlos Montero, apuntó a Efe que «el dinero será de quien lo encuentre primero».

«Y también dependerá de las instituciones en las que se haya depositado ese recurso», agregó.

En esto último coincidió Javier Oliva, profesor investigador de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien también apuntó que cómo se reparta el dinero «dependerá de dónde esté radicado ese dinero».

Pero «no va a ser nada fácil encontrar quiénes son los dueños del dinero y cómo se ha invertido», señaló.

Para el académico, las agencias de inteligencia de Estados Unidos reclamarán a sus homólogas mexicanas.

Este miércoles, el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Santiago Nieto, aseguró a medios que ambos países están trabajando «en todos los casos relacionados con Joaquín Guzmán».

Sin embargo, no pudo precisar todavía cuántas cuentas pueden estar involucradas con las actividades ilícitas del criminal. «Estamos en este momento en proceso de recepción y análisis de la información con la que se cuenta», aseguró.

Por su parte, Montero señaló que «si el dinero se encontrase en México, ya lo habrían encontrado hace mucho tiempo».

«Si está en instituciones bancarias, va a ser en Islas Caimán o Panamá, este tipo de paraísos fiscales», consideró.

Pero indagar en dichos lugares no va a ser nada fácil. El analista estima que «implicará un litigio de años determinar quién puede embargar esas cuentas y quién puede extinguir el dominio de ese dinero».

Más allá del tiempo, Estados Unidos tiene ventaja sobre México en ese aspecto, mucho más experimentado y eficaz en el combate a los activos financieros de la delincuencia.

México, según Montero, está «muy atrasado» en hallar botines del crimen organizado.

Esto le deja en una posición de espera con respecto a su vecino del norte, siendo muy poco probable que se inicie una carrera entre los dos países por ver quién halla primero el botín.

«Creo que México está a la expectativa de lo que logren los Estados Unidos y, si encuentran cuentas y bienes del Chapo Guzmán, México levantará la mano para obtener parte de lo que encuentren los Estados Unidos», expuso el especialista.

Y el argumento que tendría para reclamar ese dinero sería los agravios -asesinatos, violencia y drogas- que dejó el narcotraficante a lo largo y ancho del país en los años que dirigió el cártel de Sinaloa.

Estados Unidos, por su parte, también sufrió las consecuencias de Guzmán durante los años que este estuvo activo, pues es el principal consumidor de los países productores de sustancias ilegales.

El exlíder del poderoso cártel de Sinaloa, que este miércoles fue condenado a cadena perpetua, permanece en una cárcel federal en Manhattan, considerada una de las más seguras de Estados Unidos.

Además de la cadena perpetua y con arreglo a cada uno de los cargos, también se le impuso 30 años de cárcel por el uso de armas de fuego que, según la acusación, utilizó para mantener su imperio de drogas.

Así como otros 240 meses por el blanqueo de dinero procedente de la venta de narcóticos.

El jefe de la defensa en México del capo, José Refugio Rodríguez, sostuvo a Efe este jueves que «el caso de Joaquín Guzmán no está cerrado», pues la defensa en Estados Unidos apelará el dictamen del tribunal.

Asimismo, ante la incógnita de su fortuna, Rodríguez se mostró escéptico con la existencia de la misma.

«Yo desconozco esa inmensa fortuna y menos de esas cantidades de las que se habla, es una ilusión del Gobierno, no sé de dónde lo sacaron, no sé cómo llegaron a esa conclusión porque ese dinero no existe», zanjó. EFE

Más relacionadas