Por Gonzalo Peltzer
Buenos Aires, Argentina
En pocos días del pasado mes de diciembre han sucedido en el mundo tres hechos bien interesantes de comparar porque tienen mucho en común. Se los cuento.
El 10 de diciembre Cristina Fernández, viuda de Kirchner, tomó posesión de su segundo mandato como presidenta de la Argentina. Siete días después, murió Kim Jong-il, el dictador vitalicio de Corea del Norte, que se hacía llamar Querido Líder por sus súbditos. Y el 21 de diciembre Mariano Rajoy juró como nuevo presidente de Gobierno en España.
La presidenta argentina evitó con una martingala una disposición constitucional (artículo 93) que establece que quien le debe tomar juramento es el presidente del Senado, ante las dos cámaras del Congreso reunidas en sesión plenaria. Pero no: fue ella misma quien leyó su juramento “por Dios, por la Patria y sobre los Santos Evangelios…” y puso de testigo a su marido: “…si así no lo hiciere, que Dios, la Patria y él, me lo demanden” (desde la muerte de su marido Cristina no nombra a Néstor Kirchner; solo usa el pronombre “él”, como se refieren a Dios los que por respeto no lo nombran). Luego recibió la banda presidencial de manos de su hija Florencia.
El Querido Líder de República Democrática y Popular de Corea, que murió el pasado 17 de diciembre, gobernó su país durante los últimos 18 años y fue sucedido inmediatamente por su hijo Kim Jong-un, de menos de 30. Pero Kim Jong-il había sucedido, a su vez, a su padre Kim Il-sung, que es quien manda en Corea del Norte desde 1948 y desde 1972 ostenta el cargo oficial de Presidente Eterno de la República de Corea y sigue presidiendo el país desde el más allá (murió en 1994). Este año la dinastía cumplirá 64 años en el poder, por lo que Kim Jong-un puede completar tranquilamente un siglo en el poder.
En España el jefe del Estado es el rey Juan Carlos de Borbón, descendiente de los antiguos Capetos y del mismísimo Clodoveo, que será sucedido por su hijo el Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón y Grecia. Allí, en el Palacio de la Zarzuela de Madrid, el 21 de diciembre asumió la jefatura de gobierno español el señor Mariano Rajoy. El acto fue íntimo y de escasa solemnidad. No asistieron jefes de Estado, ni embajadores ni gobernadores, ni siquiera parientes, porque no suelen hacerlo: el jefe del Estado es el rey y hasta que no le toque a su hijo por muerte o abdicación, no hay coronación. Pero además –y aunque no tiene que ver con la austeridad de la juramentación de Rajoy– la familia real española pasa malos días, por la conducta del único yerno que le queda a los reyes, el jugador de handball Iñaki Urdangarin, de origen vasco pero plebeyo. El gobierno de España cambió diametralmente de signo, con la asistencia y el abrazo de unos a otros y los mejores deseos de éxitos que son anhelados por todos los españoles y habitantes de la Península, empezando por los reyes, claro.
En la República Argentina, Cristina Fernández ha sucedido en el poder a su marido, Néstor Kirchner y ha instalado un gabinete que cada día se parece más a una corte imperial que asiste a las reuniones para aplaudir y abrazarse profusamente. Entre marido y mujer cumplirán doce años en un poder que cada día da más señales dinásticas. Ya se sabe que las asunciones presidenciales americanas, desde el Potomac al Plata, son coronaciones sin corona. Para confirmarlo, Cristina Fernández se ha hecho coronar por su hija Florencia Kirchner delante del Parlamento y de presidentes y embajadores de toda América, hasta el Príncipe de Asturias. En la República Democrática y Popular de Corea el gobierno de una dinastía totalitaria y absolutista es tan evidente como en la época de Herodes el Grande, el que mandaba a matar a los chiquitos porque le molestaron unos rumores que trajeron los Reyes Magos. Y en el Reino de España, donde sí hay una dinastía que preside el Estado, están dando muestras de verdadera democracia y convivencia entre personas que proponen diferentes soluciones para salir de la profunda crisis económica que tiene en jaque a gran parte de Europa.
Cavilando con estos pensamientos debo confesar que encontré la solución a nuestros problemas políticos: dejemos de llamar Monarquía a lo de España, porque no hay rey traidor ni papa excomulgado. Llamémoslo Dinastía Cuchara, ya que no cortan ni pinchan y están los parientes recogiendo en palacios y recepciones la sopa boba de sus influencias. Y nuestras democracias autoritarias, en las que el Estado es patrimonio de presidentes eternos, deberían llamarse Monarquías Celestiales. Entonces dejaremos de exigir derechos y reclamar libertades y nuestros líderes vivirán tranquilos y para siempre en sus palacios celestiales.
Olvidó mencionar la dinastía Bush donde entre padre e hijo gobernaron durante casi dos décadas el país del norte EEUU. Y cuyos gobernantes, falderos y demás alaban con orgullo su supuesta democracia. Eso sin contar que su penoso sistema electoral arrebató a un auténtico ganador la presidencia para poner a un heredero Bush, que buscó armas de destrucción masiva sin encontrarlas jamás en un país que invadió a pesar de la rotunda negativa de casi la totalidad del resto del globo. Eso si es democracia?
No lo aseguro pero lo más seguro es que este diario quiera desacreditar y criticar sin decirlo, el largo periodo de palizas electorales que la oposicion ha cosechado a manos de Correa, en gran parte por su capacidad es innegable, pero en mayor media por la mediocridad de una oposición que causa repugnancia y en un periodismo tendencioso y cínico que a falta de líderes ha querido enfundarse de enemigo. Lo cual ha provocado nada mas que rechazo en el pueblo que los mandará a callar una vez más en enero del 2013….
George H. W. Bush
41st President of the United States
In office
January 20, 1989 – January 20, 1993
George W. Bush
43rd President of the United States
In office
January 20, 2001 – January 20, 2009
fuente wikipedia!
has la aritmética para ver TUS CASI DOS DÉCADAS…
Estilo de fanfarronadas… Paliza electoral la última consulta ??, vuelva a revisar, pero con honradez y objetividad TODAS las cifras .
Estilo de fanfarronadas… Paliza electoral la última consulta ??, vuelva a revisar, pero con honradez y objetividad TODAS las cifras .
Me parece que la falta de educación de un pueblo es lo que lleva al país al
caudillismo, como siempre ha ocurrido con la nefasta partidocrasia, y ahora
Correa, que es a donde va el artículo, va por el mismo camino dirigido por un
asesor de la derecha, mientras des pescado al pueblo y no le enseñes a pescar lo
tendrás seguro y en tus manos!…Mientras no exista independencia absoluta de
los poderes del estado, existe el caudillismo, existe dicha libertad en el
Ecuador? sus comentarios son obvios
Poco a poco deberiamos ergir instituciones fuertes que no se caigan en el
vendaval de cualquier viento politico.
Por sobre todo, el sistema legal y su
aplicacion de leyes debe ser elevado a ser el supremo; donde todos los actores
se cuiden de delinquir porque la ley les cae sin discriminaciones.
Educacion
de las masas tambien es prioritario; gran parte del electorado casi no entiende
por quien o porque vota.
Vocacion democrata en donde los votantes tienen el
poder y no el lider debe ser anatema.
El caudillismo es típico en América Latina. Contribuye un sistema
presidencialista que fácilmente se lo tuerce hacia la dictadura como ha hecho
Correa en Ecuador. Es hora de pensar en un sistema de gobierno Parlamentario en
el que el poder legislativo, bi-cameral, lleva la batuta y delega en un
presidente o primer ministro removible en función de su desempeño. Eso más la
educación de la población podrían mejorar el problema.
La base en que se sustenta el caudillismo es el aborregamiento de la ciudadanía. En el caso ecuatoriano, marcad por la indiferencia, la ignorancia y la credulidad. La situación actual, con programas desde Semplades para una mínima, básica y precaria sustentación de las masas; Leyes centralizadoras; el Estado como única y excluyente fuente de la actividad pública; Actividad privada sin importancia en los planes gubernamentales; Gobierno con plan de permanencia por 35 años; la poca opinión coherente y lúcida amenazada; dominio y acaparamiento de las funciones del Estado. El país de la No-Repubic!
Y si embargo te quiero. Y la razón es que muchos pueblos
son masoquistas
a ultranza, pues tienen el derecho de votar
y siempre lo hacen para mal de
sus vidas las cuales están
en causa directa con la política aun que no la
practiquen
Es verdad que la cultura de los pueblos y su manejo
por
Granujas y vividores de lo que haga falta, les agudiza el sentido
para
vivir del cuento, y ser narcisos, y asta piezas únicas a las
que hay que
reverenciar, salvo castigo de insolencia al que se
atreva a decir lo
contrario de lo que hagan. Pero también es
necesario que las clases formadas
en criterios de nación pongan
su grano de arena para llegar al torreón y
desalojar a los
prepotentes. pero ante todo, están las urnas, y de acudir a
ellas
no dejarse engañar de nuevo por mezquinos contrabandistas
de las
voluntades de pueblo, capital ,o nación. Un día y otro oigo
llantos y
lamentos.,pero de darme oportunidad para el cambio
seria igual, es por eso
que se crean los caudillos. Ecuador tienen
el suyo propio EL MASHI.