El representante de la Secretaría Nacional del Migrante (Senami) de España y fundador de la Casa Ecuatoriana en Madrid, Óscar Jara, anunció este martes que abandona la institución gubernamental en la que ha trabajado durante los últimos cuatro años.
En un comunicado, Jara señala que deja la Senami «agradeciendo a los compatriotas que le han dejado atenderles y servirles como les correspondía».
«Al separarme de esta Casa Ecuatoriana que tuve el honor de fundar dejo constancia del valor, dedicación, compromiso y sacrificio de los trabajadores de la Senami, en especial de mis compañeros en España, capaces de entender a otros ecuatorianos en las diversas necesidades de la migración», añade en la nota.
Jara recuerda que «hace cuatro años se me encomendó fundar la Casa Ecuatoriana en Madrid. Fue un encargo del Presidente Correa y de la entonces ministra Lorena Escudero. En los primeros días y para servir inmediatamente a los ecuatorianos, la Senami lo componíamos yo, una voluntaria y mi teléfono móvil».
Añade además que, tras cuatro años de trabajo, la institución tiene casas en Madrid, Barcelona y Lorca, «que nos permiten estar cerca de los ecuatorianos para que nadie quede excluido».
«La Senami y las casas ecuatorianas en España son un sitio de atención, de defensa de derechos de los migrantes, de servicio, de apoyo a las organizaciones, y he tenido la oportunidad de ver como el reto se ha convertido en certeza. Los ecuatorianos en España tienen una casa adonde acudir», subraya.
Jara recuerda en el comunicado que «sin la Senami la estafa de Air Comet hubiese quedado en un silencio vergonzoso e impune. Las tragedias de Casteldefells o de Lorca hubiesen sido más crueles para los ecuatorianos afectados».
«Y la repatriación de seres queridos un desfile indigno recolectando unas monedas al amparo de una tela. Ahora hay dignidad para los migrantes», apunta.
El hasta hoy representante de la Senami en España afirma, además, que «hoy el Ecuador está más cerca y vela por sus hijos. Hemos creído en los ecuatorianos a través de cursos de formación y apoyamos las iniciativas, porque comprobamos que los ecuatorianos somos capaces de grandes cosas», concluye. EFE