Estados Unidos restablecerá la sede de su Agencia para el Desarrollo Internacional (Usaid) en Quito, previsiblemente en 2020, tras cinco años de ausencia, avanzó este viernes su administrador adjunto para Asuntos de América Latina y el Caribe, John Barsa.
Lo hizo en una rueda de prensa en la sede de la Cancillería ecuatoriana después de la realización de la primera consulta bianual desde 2014 entre la agencia de cooperación estadounidense y el Gobierno de Ecuador, tras la firma en mayo pasado de un «Memorando de Entendimiento» entre ambas partes.
«La Usaid no solamente habló con el Gobierno de Ecuador, sino con el Congreso de los EE.UU. sobre el restablecimiento de nuestra presencia aquí en Quito», manifestó Barsa, antes de agregar que «al momento, tenemos la esperanza de que el año que viene vamos a tener un equipo pequeño aquí en Quito con estadounidenses y ecuatorianos».
El viceministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores en funciones, Augusto Saá, que compareció conjuntamente, anunció que la reapertura de la sede estadounidense «va a ser próximamente y con el personal necesario tanto a nivel cualitativo, como de cantidad para las necesidades de cooperación con Ecuador».
La anterior sede de Usaid en la capital ecuatoriana fue clausurada en 2014 después de que el entonces presidente Rafael Correa, alineado con los regímenes del denominado ‘Socialismo del Siglo XXI’, considerara que su país no necesitaba la «caridad» ni «limosnas» estadounidenses.
El representante de la agencia de cooperación estadounidense dijo que con el presidente Lenín Moreno se ha inaugurado «una nueva era de cooperación bilateral de los EE.UU. y el Ecuador, centrada en intereses mutuos» y aplaudió «sus reformas democráticas y su compromiso con la sociedad civil y la comunidad internacional».
La Usaid -abundó- está trabajando para identificar junto con el Ejecutivo ecuatoriano las áreas estratégicas de colaboración y en ese sentido, manifestó que diálogos como el de hoy eran «fundamentales» para desarrollar la agenda de trabajo.
Adelantó que la agencia tiene planeado incorporar a Ecuador en programas regionales en marcha enfocados en la protección del medioambiente, o la prevención y tratamiento de enfermedades como el zika y la malaria.
Subrayó que EE.UU. también apoya los esfuerzos ecuatorianos para responder a la llegada de personas vulnerables, «que han huido de la crisis política y económica provocada por Maduro en Venezuela«, y que asisten a las autoridades locales en el asesoramiento y capacitación de gestión de riesgos y desastres naturales.
El viceministro de Exteriores ecuatoriano recalcó que los esfuerzos en la negociación con EE.UU., «están encaminados a obtener en los próximos meses un Acuerdo de Asistencia» con el que se pueda concretar la ayuda estadounidense.
Ambas partes tienen previsto celebrar nuevas consultas a inicios de 2020, presumiblemente en Washington, añadió Saá.
La cooperación de Usaid con Ecuador comenzó en 1961, pero desde 2014 quedó suspendida hasta su reactivación gracias a la firma del memorando suscrito en mayo por el director del Usaid, Mark Green, y el canciller ecuatoriano, José Valencia y que comprende ocho ejes.
Después de una década de distanciamiento, Ecuador ha reactivado en los últimos dos años sus relaciones con EE.UU., su principal socio comercial, la nación donde vive el mayor número de ecuatorianos migrantes y donde estudia la mayor cantidad de jóvenes ecuatorianos en el extranjero.
Es además, el mayor contribuyente de ayuda humanitaria para afrontar los efectos del inusual flujo de migrantes venezolanos estos dos últimos años. EFE (I)