Entre julio y septiembre de este año, 460 bebés nacieron cada mes con bajo peso en Gaza, casi el doble que antes de la guerra, debido a la desnutrición de las madres, alertó este martes la portavoz de Unicef, Tess Ingram.
En rueda de prensa telemática desde Gaza, Ingram matizó que entre julio y septiembre de 2025 el 38 % de las embarazadas tenía desnutrición y que solo en octubre Unicef atendió a 8.300 embarazadas y mujeres lactantes con desnutrición aguda.
Antes de octubre de 2023, no se observaba desnutrición en este sector de la población, apostilló Ingram.
«Desafortunadamente, la tasa de desnutrición entre embarazadas y mujeres lactantes está tardando más en bajar que en los niños porque las madres se están sacrificando para alimentar a sus hijos», lamentó.
La portavoz de Unicef explicó que los bebes que nacen con bajo peso, por debajo de los 2,5 kilogramos, tienen 20 veces más posibilidades de morir y necesitan un cuidado que gran parte de los hospitales de Gaza no pueden ofrecer.
El número de bebés que murieron el primer día de vida se ha incrementado un 75 % en Gaza, de los 27 al mes en 2022 a los 47 al mes entre julio y septiembre de 2025.
«En Gaza, esta brutal realidad ha sido causada por el conflicto y exacerbada por las restricciones a la ayuda, que han mermado los hospitales y han estresado y dejado sin comer a las madres», afirmó Ingram.
La portavoz de Unicef destacó la importancia de abrir las rutas comerciales para que las madres puedan permitirse comida nutritiva como frutas, verduras, lácteos o carne.
Ingram añadió que, por el momento, Unicef solo está descargando una media de 38 camiones al día, aunque las autoridades israelíes le han dado permiso para hasta 60.
Los retrasos y las denegaciones en las aduanas, el número limitado de rutas de transporte dentro de Gaza y la inseguridad provocada por los ataques aéreos y los bombardeos que siguen registrándose en la Franja están complicando la entrega de esa ayuda, explicó.
«Hemos visto algunas mejoras pero seguimos llamando a la apertura simultánea de todos los pasos fronterizos de la Franja de Gaza», reclamó Ingram.
Desde el alto el fuego, Unicef ha llevado 20 respiradores, 20 incubadoras y 15 monitores a Gaza, además de suplementos para prevenir la malnutrición de 45.000 madres.
Su personal también ha examinado a más de 150.000 menores de 5 años para detectar casos de desnutrición y han puesto en tratamiento a más de 14.000. EFE (I)
