
Bogotá, 14 jun (EFE).- Asociaciones de periodistas y de medios de prensa, así como organismos de derechos humanos, coincidieron hoy en calificar como un grave retroceso para la región en materia de libertad de expresión la nueva Ley de Comunicación de Ecuador.
La nueva normativa establece la regulación de los contenidos editoriales y otorga a las autoridades la capacidad de imponer sanciones arbitrarias y censurar a la prensa, según la organización de defensa de la libertad de prensa.
«Las disposiciones restrictivas y el lenguaje ambiguo contradicen garantías constitucionales y normas internacionales sobre libertad de expresión», añadió Lauría, quien denunció que amenaza el derecho de los ciudadanos a estar informados sobre «temas delicados».
Con la aprobación de esta ley «liberticida» se produce uno de los «retrocesos más graves en materia de libertad de expresión de la historia reciente de América Latina», opinó.
Paolillo, como la mayoría de los contrarios a la ley, manifestó su preocupación por dos aspectos, la tipificación como delito del «linchamiento mediático» y la creación de un Consejo de Regulación de Medios.
El «linchamiento mediático» se produce, según la nueva norma, por medio de la publicación reiterada de informaciones con el fin de desprestigiar o reducir la credibilidad pública de personas físicas o jurídicas.
Esa figura leal no es otra cosa que el «establecimiento de un sistema de censura previa» que convierte al mandatario ecuatoriano en el «Gran Hermano» y «Gran Editor» de la nación, subrayó Paolillo.
Se refirió también al Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación, un organismo oficial que «sólo tiene representantes de los poderes públicos», que establece el reglamento que «contienen las sanciones» y «viola todos los instrumentos internacionales de derechos humanos», según el directivo de la SIP.
Además, esta ley faculta al Estado a «imponer contenidos a los medios de comunicación», lo que entraña otra violación de la libertad de expresión, apuntó el también director del semanario uruguayo Búsqueda.
En definitiva, la nueva Ley ecuatoriana se trata de un «conjunto de normas todas contrarias a la libertad de prensa y expresión» que determinan un «retroceso histórico no solo para Ecuador sino para toda América Latina, el más grave de la historia reciente» de la región, concluyó Paolillo.
Por su parte, el periodista ecuatoriano Emilio Palacio, exiliado en Miami, calificó de mera «formalidad» la aprobación de la ley, ya que, según dijo, su propósito, «acallar las opiniones disidentes», ya se había consumado.
«La aprobación de esta ley era ya casi innecesaria. El objetivo, acallar a cualquiera que tenga una opinión disidente con el Gobierno ecuatoriano, estaba logrado», dijo a Efe el excolumnista del diario El Universo, quien se exilió tras ser condenado a tres años de cárcel por una demanda del mandatario ecuatoriano Rafael Correa.
En Colombia, medio centenar de medios publicaron hoy un mismo editorial con el título «¿Estocada a la prensa en Ecuador?».
La iniciativa partió de la Asociación Colombiana de Editores de Diarios y Medios Informativos (Andiarios).
A su juicio, esta ley respaldada por el presidente Correa «desconoce los estándares mínimos que, para garantizar el derecho fundamental a la libertad de expresión, información y prensa, se encuentran consagrados en la Constitución de ese país y en tratados internacionales».
Por eso, el editorial de Andiarios considera que el proyecto convierte el derecho a la información «en un servicio público sometido al control y vigilancia del Estado a través del Poder Ejecutivo», lo que pondría en riesgo la subsistencia de medios privados y favorecería la concentración de los públicos.
El Gobierno ecuatoriano y la oficialista Alianza País han defendido la ley como un medio de frenar los abusos de cierta prensa y devolver a los ecuatorianos «la voz» que los «medios monopólicos les han quitado».
La organización no gubernamental Fundamedios apuntó, por su parte, que la norma consagra varios temas que ponen en situación «de grave riesgo a las libertades de expresión y de prensa».
«Vamos camino a la consolidación de un régimen fascista», escribió el legislador opositor Andrés Páez en su cuenta de Twitter. EFE
Lee aquí el texto final de la nueva Ley de Comunicación.





