Assad pide terminar apoyo a grupos armados

DAMASCO, Siria (AP) — El presidente sirio Bashar al Assad dijo al enviado de la ONU y la Liga Árabe este miércoles que el apoyo extranjero a la oposición armada debe cesar para que cualquier solución política al conflicto del país tenga éxito, informaron medios.

Las declaraciones de Assad a Lakhdar Brahimi durante su reunión en Damasco crean mayores dudas sobre los de por sí frágiles esfuerzos para convocar a una conferencia internacional de la paz para terminar con la guerra civil en el país.

Estados Unidos, Rusia y las Naciones Unidas han intentado por meses reunir al gobierno sirio y a la oposición en Ginebra para intentar negociar una resolución política al conflicto. Tras múltiples retrasos los esfuerzos se reanudaron seriamente el mes pasado para organizar la conferencia, pero la oposición siria sigue profundamente dividida entre los que estarían dispuestos a asistir, mientras que el gobierno se niega a negociar con la oposición armada.

El viaje de Brahimi a Damasco fue la escala más reciente en su gira regional de los últimos días, en la cual trata de impulsar las negociaciones de paz propuestas para Ginebra que serían realizadas el próximo mes. Pero Assad, cuyo gobierno ha recuperado fuerzas últimamente, no mostró señales de tratar de ceder algo para llegar a un acuerdo.

«Para que cualquier resolución política tenga éxito es crucial detener el apoyo a los grupos terroristas y a los países que los financian, facilitan la entrada de terroristas mercenarios y les ofrecen dinero, armas y apoyo logístico«, dijo Assad a Brahimi según lo citó la televisora Al-Ikhbariya. «Únicamente el pueblo sirio tiene derecho a forjar el futuro de Siria. Cualquier solución debe ser aprobada por ellos y reflejar sus deseos más allá de cualquier intervención extranjera«.

«Esto es primordial para preparar las circunstancias para el diálogo y crear mecanismos claros para lograr esta meta», dijo Assad.

Turquía, Arabia Saudita y Qatar son algunos de los simpatizantes más fuertes de la oposición siria y han proporcionado apoyo financiero y logístico a los rebeldes. Estados Unidos y algunos de sus aliados europeos han proporcionado ayuda no letal, aunque Washington ha prometido por meses enviar armamento ligero a los combatientes de la oposición apoyados por Occidente.

La reunión del miércoles entre Brahimi y Assad fue el primer contacto directo entre los dos en 10 meses. Tras su viaje anterior a Siria, en diciembre de 2012, Brahimi enfureció a las autoridades del país cuando dijo que 40 años de mandato de la familia Assad era «demasiado». Las autoridades sirias lo acusaron entonces de ser parcial.

Los esfuerzos diplomáticos buscan terminar un conflicto que ha matado a más de 100.000 personas y ha obligado a unos 2 millones a escapar del país. La guerra civil en su tercer año enfrenta al movimiento rebelde principalmente suní contra un gobierno cuyas fuerzas están compuestas por miembros de la secta alauita de Assad, derivada del islam chií.

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