Jackson cierra la trilogía del Hobbit tras casi 20 años dedicado a Tolkien

Bilbo, personaje principal de 'El Hobbit'. Foto de Archivo, La República.

Madrid, 14 dic (EFE).- Casi 20 años después de que Peter Jackson empezara a plantearse adaptar la historia del Hobbit al cine, esta semana llega a las salas el último de los tres largometrajes en los que ha contado las aventuras de Bilbo Baggins y la Tierra Media ideadas por Tolkien y lo hace rodeado de una enorme expectación.

«The Hobbit. The Battle of the Five Armies», el cierre de la trilogía del Hobbit, llega el miércoles a las pantallas de medio mundo con el objetivo de superar las cifras de la primera entrega, «An Unexpected journey» (2012), la más taquillera, con una recaudación de 1.017 millones de dólares, según los datos de la web especializada Box Office Mojo.

«Ha sido un viaje impredecible. Algo de lo que estoy muy orgulloso», explicó Jackson en la presentación en Londres de una historia que se desarrolla 60 años de los hechos narrados en la otra gran trilogía tolkiana, «The Lord of the Rings».

Seis películas en total con las que Jackson empezó a soñar en 1995. Dos años después comenzó a trabajar en la adaptación del Señor de los Anillos, aunque el rodaje de esa primera trilogía no empezaría hasta octubre de 1999.

Jackson rodó las tres historias juntas, que posteriormente se estrenarían con enorme éxito en 2001, 2002 y 2003.

Casi 2.000 millones de dólares (1.916) de recaudación entre las tres y una inagotable fiebre por las historias convencieron a Jackson para embarcarse de nuevo en otro proyecto agotador y larguísimo, la adaptación del Hobbit, la historia que precede en el tiempo a la épica destrucción del anillo.

Aunque en principio el realizador neozelandés iba a limitarse a las labores de productor ejecutivo, con el mexicano Guillermo del Toro en la dirección de lo que en principio iban a ser dos largometrajes.

En agosto de 2008 comenzaron las labores de preproducción para un proyecto que debía comenzar a rodarse en 2010, de nuevo en Nueva Zelanda con un guión realizado conjuntamente por Del Toro y Jackson.

Pero en mayo de 2005 el mexicano abandonó el proyecto por los retrasos en el rodaje y aseguró que había sido «la decisión más dura» de su vida, lo que hizo entrar de nuevo a Jackson como director.

Tras múltiples problemas -de salud del director, con los sindicatos de actores neozelandeses o de financiación- el rodaje se llevó a cabo en 2011 con un reparto encabezado por el británico Martin Freeman como Biblo Baggins, acompañado por Richard Armitage, Evangeline Lilly, Luke Evans o Benedict Cumberbatch, prestando su voz al terrorífico dragón Smaug.

En esta nueva trilogía también se contó con algunos de los personajes más populares del Señor de los Anillos, como Gandalf (interpretado por Ian Mckellen), Galadriel (Cate Blanchett), o Legolas (Orlando Bloom).

Y tan satisfecho quedó Jackson del rodaje y los estudios de la rentabilidad del Señor de los Anillos, que finalmente se decidió que el Hobbit, una novela de entre 300 y 400 páginas en función del formato, se convirtiera en una nueva trilogía.

Una decisión acertada a tenor por el éxito de público y taquilla y por la defensa que sus millones de fans hacen de la historia en todo el mundo.

La primera entrega, «The Hobbit: An Unexpected Journey» llegó a las salas en diciembre de 2012 y cosechó el resultado esperado. 1.017 millones de dólares de recaudación en todo el mundo que la convirtió en la quinta más taquillera de aquel año.

En 2013 sería el turno de «The Hobbit: The Desolation of Smaug», que bajó ligeramente a los 958 millones de dólares de taquilla, una cifra que se espera superar con «The Battle of the Five Armies», en la que «las razas de los Enanos, los Elfos y los Hombres tienen que decidir si aúnan sus fuerzas o se abandonan a la destrucción» dirigida por Sauron.

Pero será un cierre temporal de las aventuras del Hobbit porque Jackson volverá a Nueva Zelanda «a trabajar en la versión extendida» de «The Hobbit» y a pensar «en nuevos proyectos».

Aunque entre esos proyectos no está la tercera gran obra de Tolkien, «El Silmarillion», pero por una razón que se escapa al posible deseo del realizador neozelandés.

«The Lord of the Rings» y «The Hobbit» son las «únicas obras de Tolkien de las que se han vendido los derechos, por lo que, de momento, no habrá más películas», afirmó Jackson en la presentación del último Hobbit. EFE

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