Un encapuchado que participaba en los disturbios de Baltimore no pudo ser alcanzado por la policía, pero sí por su madre. A empujones y cachetadas, la mujer sacó a su hijo de las protestas que se dieron a raíz de la muerte de Freddy Gray, un joven negro que estaba en custodia de las fuerzas de seguridad.
El incidente fue grabado por testigos y de inmediato atrajo la atención de los medios de comunicación y las redes sociales, según el diario mexicano Excelsior.
Incluso la Policía de Baltimore hizo alusión al regaño materno. «Si observas la escena, tenemos a una madre tomando a su hijo con el rostro encapuchado y golpeándolo en la cabeza porque ella estaba muy avergonzada. Ojalá tuviéramos más padres que se hacen cargo de sus hijos», comentó el comisionado policial Anthony Batts durante una conferencia de prensa este martes.
La Policía informó que el lunes hubo 15 oficiales heridos, seis de ellos de gravedad, y 27 detenidos durante la jornada nocturna de enfrentamientos, actos vandálicos y saqueos derivados de la muerte del joven afroamericano Freddie Gray.
Gray murió el 19 de abril en un recinto policial en circunstancias no aclaradas luego de ser arrestado una semana antes. Según abogados de la familia, cuando el joven falleció, tenía la columna vertebral seccionada a la altura de las cervicales.
La Policía de Baltimore deberá entregar el 1 de mayo su investigación del caso, pero el viernes aceptó que Gray tendría que haber recibido atención médica inmediata tras su arresto. Videos de la detención grabados por transeúntes muestran cómo la policía tiró al piso de forma violenta al joven, que gritaba de dolor, antes de subirlo a un furgón para llevárselo. [I]