ATENAS (AP) — Grecia afirmó el viernes que presentará a sus acreedores nuevas propuestas durante el fin de semana en un intento por reanimar las estancadas gestiones que hacen temer la posibilidad de la bancarrota.
La confirmación de que las conversaciones seguirán el fin de semana tuvo lugar después que cerraron los mercados europeos. Los temores de que las dos partes estén más alejadas que nunca en cuestiones como las pensiones y el presupuesto hicieron perder 5,9% a la bolsa de Atenas.
Un funcionario del gobierno griego indicó empero que cabe la posibilidad de un acuerdo con los acreedores después que el primer ministro Alexis Tsipras conferenció con los ministros.
«El gobierno griego está preparado para ofrecer contrapropuestas a fin de zanjar las diferencias restantes», dijo un funcionario, que habló con la condición de no ser identificado por no estar autorizado a informar sobre el tema. Agregó que el gobierno considera que el acuerdo «está más cerca que nunca» y que representantes griegos se reunirán con los representantes de los acreedores el sábado en Bruselas.
Aumentan las presiones sobre Grecia. El fondo de rescate por 240.000 millones de euros (270.000 millones de dólares) está vigente hasta el 30 de junio, después de lo cual ya no tendrá acceso a los fondos que necesita desesperadamente para pagar deudas y evitar incurrir en una mora que podría obligarla a abandonar el euro.
El indicio más dramático de un estancamiento en las discusiones sobrevino el jueves cuando el Fondo Monetario Internacional ordenó a sus negociadores a abandonar las conversaciones con los funcionarios griegos en Bruselas aduciendo falta de progresos.
Las conversaciones del fin de semana tendrán lugar antes de una reunión avanzada la semana próxima de los 19 ministros de finanzas de la eurozona, una reunión que el presidente de la Unión Europea, Donald Tusk, considera crucial y decisiva.
Pese a la falta de progresos visibles, la canciller federal alemana Angela Merkel mostró disposición a continuar las conversaciones, y su enfoque pesa quizás más que los demás ya que Alemania es el mayor acreedor individual de Grecia.
«Donde hay voluntad hay un camino, pero esa voluntad debe provenir de todos», afirmó en un discurso en Berlín. Alemania destacó que cualquier solución tendrá que incluir el FMI.
Los acreedores de Grecia —estados de la eurozona, el Banco Central Europeo y el FMI— desean que Grecia se comprometa a implementar reformas económicas como requisito para darle acceso a los 7.200 millones de euros que quedan en el fondo de rescate financiero.
Los principales temas en disputa parecen ser los cortes que los acreedores exigen en las pensiones griegas, cambios en el mercado laboral y la reducción del presupuesto gubernamental. El principal funcionario de la eurozona, Jeroen Dijsselbloem, afirmó que corresponde al gobierno griego presentar propuestas adecuadas.
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