MEXICO — El técnico de la selección mexicana de fútbol Miguel Herrera fue despedido el martes por agredir a un periodista crítico de su gestión.
Decio de María, quien el sábado asume como presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, dijo que el incidente del lunes en un aeropuerto en Filadelfia «no muestra el espíritu de competencia leal y respetuosa» que impulsa el organismo.
«He tomado la decisión de separar de la dirección técnica nacional a Miguel Herrera, no es una decisión sencilla, es compleja y muestra lo que somos y sobre todo lo que debemos ser», dijo De María en conferencia de prensa.
«Me reuní con Miguel Herrera y otros compañeros de la Federación y hablamos largo, puntual y profundo y al final se tomó esta decisión; creo que Miguel entiende perfectamente el fondo de la decisión y que nuestros valores y principios están por encima de cualquier resultado«, añadió.
De María no dijo quién reemplazará al «Piojo» Herrera, quien dirigió a México hasta los octavos de final del Mundial del año pasado y el domingo ganó la Copa de Oro. Además, bajo su gestión el «Tri» fue eliminado en la primera etapa de la Copa América en junio en Chile. El partido ante Jamaica, gracias a lo cual clasificó a la final de la Copa de Oro fue extremadamente polémico y hasta la CONCACAF tuvo que reconocer que México se benefició de un mal arbitraje.
«No podemos apresurar la decisión del nuevo cuerpo técnico», afirmó De María.
El periodista Christian Martinoli, de la cadena mexicana de televisión TV Azteca, dijo que Herrera le pegó un puñetazo en el cuello cuando se encontraron el lunes en un aeropuerto en Filadelfia, un día después que México ganó 3-1 a Jamaica en la final de la Copa de Oro.
En el incidente también estuvo involucrada la hija de Herrera, que empujó y le dio una bofetada a Luis García, también comentarista de Televisión Azteca y exjugador del Atlético de Madrid.
El hecho mereció la condena general de los medios y la exigencia de Televisión Azteca a la Federación de que investigue el incidente y aplique sanciones.
«Nos extraña y preocupa enormemente el comportamiento del director técnico de la selección nacional, Miguel Herrera. La Federación Mexicana de Fútbol no puede permitir que se repita una agresión como la sufrida por nuestro colaborador Christian Martinoli a manos del señor Herrera«, aseguró la cadena de televisión.
El periodista deportivo David Faitelson, quien en el pasado fue agredido físicamente por el futbolista mexicano Cuauhtémoc Blanco, comentó en su columna en Milenio que el técnico Herrera tocó fondo y se comportó «como lo que es, un auténtico barbaján, un barra brava, un corriente, vulgar y por grandes momentos un verdadero estúpido».
El director de La Afición, del diario Milenio, Rafael Ocampo, consideró que Herrera «no puede pretender seguir al frente de la selección mexicana de fútbol» después del incidente de agresión a Martinoli.
«Los partidos no terminan cuando el árbitro pita el final. En nuestra profesión los partidos nunca terminan y como personajes públicos y que representamos a una institución, tenemos que tenerlo perfectamente claro», apuntó De María.
La animadversión de Herrera se originó con la eliminación de México de la Copa América de Chile 2015, la cual fue atribuida por Martinoli a su excesivo protagonismo y al hecho de que pasa más tiempo en la publicidad de productos que en el banquillo.
La hija de Herrera lo atacó en las redes sociales y el técnico lo insultó y lo amenazó con ajustar cuentas cuando se encontraran, lo que ocurrió este lunes en el aeropuerto de Filadelfia.
Herrera asumió el mando de la selección mexicana en noviembre de 2013 en medio de una grave crisis de resultados, luego de haber terminado cuarto en las eliminatorias para la Copa del Mundo y ser orillado a la repesca internacional frente a Nueva Zelanda.
El técnico salvó el pase al Mundial al vencer a Nueva Zelanda por un global de 9-3 y se ganó la ratificación para el Mundial de Brasil 2014, donde cayó en octavos de final ante Holanda.
El Tri de Herrera fue eliminado en la primera ronda de la Copa América 2015 con una derrota y dos empates y terminó en el penúltimo lugar del torneo, solo por encima de Jamaica, que fue su rival en la final de la Copa Oro.
En total, Herrera dirigió a la selección mexicana en 37 partidos con un rendimiento de 18 triunfos, doce empates y siete derrotas, con 63 goles anotados y 34 recibidos. (D).