Los precios de las acciones bajaban levemente en Wall Street el miércoles por la mañana al inicio de transacciones en la Bolsa de Valores de Nueva York, en momentos en que los inversionistas siguen atentamente los últimos acontecimientos relaciones con la campaña electoral en Estados Unidos.
El promedio industrial Dow Jones perdía 17 unidades (0,1 para ubicarse en 18.020, mientras el Standard & Poor’s 500 perdía una unidad (0,1%) a 2.110 y el tecnológico Nasdaq perdía una unidad (menos de 0,1%) a 5.151.
Wall Street se inunda definitivamente de nerviosismo, tras acumular tres cierres seguidos en rojo, por la inminencia de la cita electoral por la Presidencia de EE.UU.
Si a lo largo de las últimas semanas la firme candidatura de la demócrata Hillary Clinton ganaba posiciones para alegría del mercado, poco amigo de temperamentos erráticos y populistas como los del rival republicano Donald Trump, los últimos días todo ha dado un giro de 180 grados.
La reapertura de la investigación del caso de los correos electrónicos a Clinton viene reduciendo la diferencia entre uno y otro en los últimos días, para incertidumbre palpable en los mercados, un nerviosismo que promete instalarse al menos hasta el próximo 8 de noviembre, dentro de una semana.
«Según nos acercamos a la elección, la gente empieza a estar más y más inquieta», describía el parqué neoyorquino hoy al Wall Street Journal el director de ETF Trading Mohit Bajaj.
«Con las presidenciales ya la próxima semana, y el aumento de las probabilidades de Trump, todo suma más incertidumbre para el mercado», coincidía el jefe de estrategia de inversión de Northwestern Mutual, Brent Schutte.
Según el más reciente sondeo divulgado hoy por el diario The Washington Post y la cadena ABC News, Trump lograría un punto más que Hillary, 46 % para el republicano frente al 45 % para la exsecretaria de Estado.
En esta segunda sesión semanal, la de estreno del mes de noviembre, el Dow Jones llegó a perder momentáneamente la barrera de 18.000 puntos y el índice S&P 500 terminó en caídas por sexto día consecutivo, su mayor periodo de retroceso en todo el año.
Pero además de los comicios, Wall Street está preocupado por el inicio de la reunión de dos días sobre política monetaria de la Reserva Federal, que concluirá mañana y que será la última antes de las presidenciales.
Y, por si no fuera suficiente, sigue la tanda de resultados empresariales decepcionantes. Las cuentas trimestrales que presentó antes de la apertura el gigante farmacéutico Pfizer fueron un jarro de agua fría para las cotizaciones.
* Con reportes de EFE