Los líderes de Alemania, Francia, Italia, España y Reino Unido, así como el presidente estadounidense Barack Obama, acordaron hoy en la cumbre celebrada en Berlín mantener las sanciones dictada contra Rusia por el conflicto de Ucrania.
Según un comunicado emitido por la Casa Blanca, al término de la reunión y tras la partida de Obama de la capital alemana, los seis líderes consideran que las medidas deben persistir hasta que se implementen los acuerdos de Minsk y se consiga un alto el fuego estable en el este de Ucrania.
Dichas sanciones se remiten a la situación en Ucrania y que no se planteó una extensión al papel que desempeña Moscú en Siria, precisó la canciller alemana, Angela Merkel, en una comparecencia conjunta con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, con quien mantuvo un encuentro bilateral tras la cumbre.
En la cumbre entre los cinco líderes europeos y el presidente Obama se ratificó asimismo el total rechazo por la anexión «ilegal» de Crimea, apuntó por su parte Rajoy, en tanto que origen del conflicto actual, así como la aspiración a que se logre un alto el fuego duradero en el este de Ucrania.
El mantenimiento de las sanciones a Moscú fue uno de los puntos de la cumbre, donde asimismo se abordó la dramática situación en Siria y muy especialmente en Alepo, coincidieron en destacar la canciller alemana y su homólogo español.
Asimismo trataron de la situación en Irak, destacó Rajoy, y especialmente los avances en la ofensiva para arrebatar al grupo yihadista Estado Islámico (EI) el control de la ciudad de Mosul.
Obama partió hoy sobre las 11.55 GMT de Berlín, donde había llegado el miércoles, en dirección a Lima para participar en el Foro de Cooperación Asia-Pacífico (APEC).
El presidente estadounidense celebró en la capital alemana la que previsiblemente fue su última cumbre con sus principales aliados europeos: el presidente francés, François Hollande; la primer ministra británica, Theresa May, y el primer ministro italiano, Matteo Renzi, además de Merkel y Rajoy.
La visita a Alemania de Obama ha estado marcada por las incertidumbres en las relaciones transatlánticas y a escala global que plantea la victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU.
En su comparecencia conjunta de ayer, tras una primera reunión bilateral, Merkel y Obama subrayaron el valor de la relación transatlántica y expresaron su confianza en que Trump siga ese mismo camino.
Obama reiteró ya ahí el compromiso de su país con el pueblo de Ucrania y dejó claro que en su opinión las sanciones a Moscú se mantendrán mientras no cumpla sus compromisos.
En este contexto, mostró su «esperanza» de que su sucesor en la Casa Blanca, aunque no siga exactamente la línea marcada por su administración, adopte una «posición constructiva» hacia Moscú, pero también «realista», y se oponga a Rusia cuando se distancia de los «valores y las normas internacionales». EFE