Una comisión de ciudadanos defensores de los Derechos Humanos dirigió una comunicación al arzobispo de Guayaquil, Luis Cabrera, pidiéndole que verifique la situación del exasambleísta Galo Lara, quien actualmente cumple una condena en la cárcel regional de Guayaquil, tras la sentencia en su contra por el triple asesinato de Quinsaloma.
La misiva se convierte en la segunda que llega a manos de representantes del Clero, esta vez de Guayaquil. La primera estuvo dirigida por el propio exlegislador al presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), monseñor Fausto Travez.
Un día después de que La Hora difundiera una carta del detenido, en el Puerto Principal, el presidente del Colegio de Derechos Humanos del Ecuador, Franklin Moreno, la activista Cristina Vinueza, el dirigente socialista Diego Delgado, entre otros actores, acordaron redactar este nuevo manifiesto a fin de que el monseñor verifique el estado de Lara.
“Aspiramos a que el poder político del país, que siempre se proclama católico, permita que una de sus importantes y valiosas autoridades realice una labor estrictamente solidaria y evangélica. Los presos también son seres humanos y merecen, cuando menos, ser tratados como tales, esa es nuestra petición respetuosa ante usted, distinguido Arzobispo de la Arquidiócesis de Guayaquil”, dice el documento.
En la carta se recuerda que todas las personas tienen derecho en condiciones de igualdad a ser escuchadas con justicia, por un tribunal independiente e imparcial para la determinación de sus derechos y obligaciones. (I)