Nuevas denuncias sobre torturas a abogados de derechos humanos en China

Los abogados dedicados a casos de derechos humanos en China Wang Quanzhang y Li Heping han sufrido «varios tipos de tortura» bajo detención, incluido golpes con porras eléctricas que les provocaron desmayos, denuncia hoy la organización China Human Rights Lawyers Concern Group (CHRLCG).

Wang y Li forman parte del grupo de letrados y activistas arrestados en el verano de 2015 en una campaña oficial contra su colectivo que afectó a unas trescientas personas, según datos de grupos en defensa de los derechos humanos.

La mayoría de ellos fueron liberados al poco tiempo tras ser sometidos a interrogatorios, y hasta ahora cuatro han sido sentenciados y otros cuatro letrados siguen bajo detención, informaron a Efe desde CHRLCG.

La ONG, que sigue de cerca la situación de los afectados en esta campaña, explica que Wang y Li estuvieron seis meses encerrados en enclaves secretos de la Policía donde sufrieron todo tipo de abusos antes de ser arrestados oficialmente y trasladados a otro centro de detención regular, donde permanecen a la espera de juicio.

El grupo asegura que la Policía «hace lo que sea» para forzar a los detenidos a confesar, haciendo uso de altos niveles de «tortura».

El comunicado de esta organización con sede en Hong Kong se difunde poco después de que otro abogado arrestado en esta campaña denunciara haber sufrido graves torturas en una de estas instalaciones secretas.

El letrado «torturado», Xie Yang, explicó con todo tipo de detalles los abusos sufridos en una conversación con dos abogados que le pudieron visitar una vez fue trasladado a un centro de detención regular, y que la página chinachange.org ha difundido.

Según aseguró Xie, los agentes le mantuvieron largos periodos sin dormir, sin beber, sentado en una «silla colgante» a riesgo de ser apaleado si se movía, forzándole a confesar y ante amenazas de represalias contra su mujer y su hija.

De acuerdo con la ley china, la Policía puede mantener a una persona bajo «vigilancia residencial en una ubicación determinada» durante seis meses, sin permitir que se contacte con un abogado o la familia si ello puede obstruir la investigación o poner en peligro la seguridad del Estado, una medida que las ONG aseguran que da lugar a abusos.

En esta misma situación, se teme que se encuentre en estos momentos Jiang Tianyong, uno de los abogados más prominentes del país, que ha llevado algunos de los casos más polémicos para el régimen, como el del disidente ciego Chen Guangcheng, exiliado en EEUU tras escapar de un arresto domiciliario.

Jiang desapareció a finales del año pasado y meses después la Policía confirmó su arresto, si bien no se ha informado de dónde se encuentra, por lo que su mujer -a quien Jiang obligó a exiliarse a Estados Unidos- cree que puede estar siendo «torturado», recoge CHRLCG.

Otro de los letrados detenidos, Li Chunfu, fue liberado a principios de este mes en un estado «demacrado» y con serios problemas mentales tras casi un año y medio en manos de las autoridades, según han relatado su familia y amigos. EFE

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