FRANCEVILLE, Gabón (AP) — Camerún no necesitó a sus jugadores de renombre para llegar a la final de la Copa Africana de Naciones. Lo consiguió más bien con numerosos jóvenes, descritos por su técnico como un grupo de amigos a quienes les gusta jugar al fútbol.
Ese joven plantel derrotó el jueves 2-0 a la poderosa Ghana y disputará el título ante el máximo ganador de este certamen, Egipto, que ostenta siete títulos.
«Es un grupo de 23 amigos. Nunca antes había visto esto en un equipo de fútbol», destacó el técnico Hugo Broos, quien tampoco era un estratega muy conocido y nunca había estado al frente de una selección nacional.
Michael Ngadeu abrió el marcador a los 72 minutos y Christian Bassogog sentenció el resultado con un contragolpe en los descuentos.
Camerún disputará su sexta final de la Copa Africana, aunque primera desde 2008. Ha cumplido un papel destacado sin muchas de sus estrellas, que siguen en Europa con sus clubes.
Probablemente algunos de esos jugadores más famosos estarán lamentando su decisión de rechazar la convocatoria al equipo nacional.
Broos conformó su plantel con 14 jugadores que jamás habían participado en un torneo relevante. Respondieron eliminando a Senegal en los cuartos de final y a Ghana en semifinales.
Ghana volvió a quedarse corta respecto de las expectativas, y ahora suma 35 años sin un título de la Copa Africana. Además, ha perdido dos finales y cuatro semifinales en las seis últimas ediciones del torneo.
Camerún ha conquistado el título regional en cuatro ocasiones, pero la última vez que se apoderó de la copa fue en 2002. Y su desempeño reciente en torneos oficiales había sido terrible.
Perdió todos sus partidos en los Mundiales de 2010 y 2014. En la Copa Africana de 2015 tampoco logró una sola victoria.
Además, habían surgido varios desacuerdos entre los jugadores y la federación por pagos y bonificaciones. Pero en Gabón, este equipo se ha dedicado a disfrutar.
«Puedo contar con ellos, y eso es porque somos un grupo de amigos», afirmó el técnico belga. (D)