NUEVA YORK (AP) — Carolina Herrera cree que la moda es «arte en movimiento», así que, naturalmente, uno de sus lugares predilectos para mostrar su ropa es un museo.
En el pasado, la diseñadora venezolana presentó colecciones en el imponente patio del Frick Collection, y esta Semana de la Moda lo hizo en el jardín de las esculturas del Museo de Arte Moderno (MoMA).
«He tratado de hacerlo por muchos años y finalmente pude. Me siento muy honrada de estar aquí», dijo Herrera antes de su show del lunes por la noche.
El espacio al aire libre con fuentes efervescentes sirvió como telón de fondo para su elegante colección de fiesta inspirada en los años 80.
«Estar en el jardín del MoMA es uno de esos momentos en los que uno se pregunta, ‘¿está esto realmente sucediendo? ¿Es la vida real?’ ¡Es tan hermoso!», dijo la actriz de Disney Peyton List, quien estuvo sentada en primera fila junto a la modelo Lily Aldridge y las actrices Michelle Monaghan y Crystal Reed.
«Creo que esta es la primera vez que de hecho veo este jardín de noche, así que estoy bastante fascinada», dijo Monaghan.
Hubo telas a cuadros y muchas mangas abombadas, grandes hombreras, lunares de colores y cinturas sujetadas con enormes lazos. Las lentejuelas imperaron.
«Esta colección se trata de color», dijo Herrera. «El color es muy poderoso y te hace pensar de una manera diferente. El color te hace ver las cosas con otros ojos».
La emblemática camisa blanca de Herrera también hizo una aparición en la pasarela, esta vez con un profundo cuello en V, mangas dramáticas y una falda envolvente a cuadros.
La diseñadora, sin embargo, evitó su usual camisa de botones en favor de un conjunto negro.
(F)