Las autoridades ecuatorianas reinauguraron hoy el Parque Nacional Cotopaxi, icono turístico del país y área protegida más visitada de Ecuador continental, tras más de dos años de cierre por una erupción volcánica.
En agosto de 2015 se declaró el cierre total del parque y sus instalaciones debido a un aumento rápido y significativo de la actividad volcánica del Cotopaxi, cuya cumbre, situada a 5.897 metros, era uno de los principales atractivos de este espacio protegido.
El ministro de Ambiente, Tarsicio Granizo, manifestó en una rueda de prensa, celebrada en el centro de interpretación Mariscal Sucre en la ladera del volcán, que era «un orgullo abrir por fin la cumbre del Cotopaxi, uno de los más emblemáticos del país«.
Y confió en que la medida sirva para «fortalecer el lugar como destino turístico del país», después de que el parque pasara de recibir unos 200.000 visitantes en 2014 a poco más de la mitad en la actualidad, que no podían hasta ahora visitar todas las áreas.
Héctor González, gobernador de la provincia, señaló que el 15 por ciento del producto interior bruto de Cotopaxi se vio disminuido debido a la clausura total del parque, afectando especialmente a los sectores hotelero, comercial y de transporte.
Por su parte, el titular de Turismo, Enrique Ponce de León, indicó que el Gobierno «se ha tomado el tiempo para que la apertura pueda ser segura» y destacó el trabajo conjunto de todas las autoridades relevantes para lograr su reinauguración.
«Es una montaña absolutamente accesible, con refugios de calidad que van a permitir pernoctar, servicio de alimentos y bebidas, lo cual implica que no está solamente dirigido a un turismo de alta montaña«, declaró a Efe Ponce de León, antes de destacar los atractivos del volcán.
El parque se podía visitar en los últimos meses de forma parcial, sin ascender hasta la cima.
«Tiene también una cumbre maravillosa, guías cualificados y un glaciar«, añadió el titular de Turismo, quien animó a los ecuatorianos a conocer su país y convertirse en sus mejores «embajadores».
Daniel Andrade, director del Instituto Geofísico, reveló que la actividad del volcán «es probable que continúe igual» y que a comienzos de 2016 su nivel había descendido, aunque advirtió de que más a largo plazo «se está acercando a una etapa evolutiva fuerte» y que «será muy posible que entre en erupción».
Está previsto que este jueves se desarrolle un simulacro dentro de un programa de contingencia para analizar la preparación ante una nueva erupción en las regiones de Pichincha, Napo y Cotopaxi.
La reapertura completa del parque ha sido posible con la colaboración de los ministerios de Ambiente, Turismo, de la Secretaría de Gestión de Riesgos, el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional y la Asociación de Guías de Montaña. EFE
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