API – Barcelona ha vivido horas intrigantes e intensas en Santa Cruz de la Sierra. Estancados en Bolivia, los jugadores y cuerpo técnico del Ídolo del Astillero han pasado expectantes con relación a la modalidad que se ejecutará su viaje hacia Porto Alegre para enfrentar la semifinal de vuelta ante Gremio de este miércoles.
El conjunto amarillo se entrenó la mañana de este martes en las instalaciones del club Blooming y su viaje hacia Brasil ya estaría solucionado. Un avión de la FAE recogería a la delegación torera de Bolivia para emprender vuelo hacia Porto Alegre.
La expectativa es que el equipo y cuerpo técnico lleguen a destino entre la noche del martes y la madrugada del miércoles.
El resto de los miembros de la delegación (directivos, hinchas y periodistas) tendrán que regresar a Guayaquil en un vuelo comercial, pues la aeronave emergente de FAE únicamente cuenta cupo para 32 personas.
La empresa mexicana Global Air ha quedado en evidencia. La compañía, que se dedica únicamente a vender vuelos chárter, padecería de una clara falta de experiencia en el manejo de este tipo de logística, aún cuando se han encargado de varios traslados para otros clubes.
«Global Air no tiene la experiencia adecuada. Se decantó por el precio, porque un vuelo chárter tiene un menor costo. Tiene 22 años de existencia», expresó Nicolas Larenas, experto en aviación, en diálogo con Radio Platinum.
Barcelona, a pesar que consiguió un vuelo de la FAE para llegar a Porto Alegre, no arribarían dentro del plazo establecido por la FIFA de 24 horas. «El Hércules L100 es un avión donde te sientas en unas mallas y te agarras con las manos. Además, es un muy lento», finalizó Larenas. (D).