El Gobierno venezolano puso hoy en marcha nuevos aumentos de tarifas en el marco de su plan de «recuperación y prosperidad económica» sin dejar a un lado los controles gubernamentales que planea expandir a más sectores.
Los sistemas de transporte público y privado comenzaron a cobrar las nuevas tarifas establecidas por el Ejecutivo de Nicolás Maduro y que suponen incrementos que superan el 1.000.000 %.
La vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez, ha explicado que las nuevas tarifas son «transitorias» mientras llega septiembre y se pone en marcha el plan de subsidio directo de combustible a las unidades de transporte del país, según reseñó hoy la estatal Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
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Por su parte, el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, explicó hoy que los servicios del metro de Caracas así como las unidades de transporte terrestres que dispuso el Gobierno para cubrir las rutas de la capital venezolana y áreas cercanas tendrán un costo de 0,5 bolívares soberanos, menos de un centavo de dólar.
Este aumento representa un incremento superior al 1.000.000 % pues el valor del pasaje en estas unidades era de 4 bolívares y pasó a 50.000, ahora expresado como 0,5 bolívares soberanos desde que el lunes entró en vigencia una reconversión que le quitó cinco ceros a la moneda nacional.
Desde hoy rige también un nuevo precio oficial del transporte urbano que subió 400 % y es un monto supuestamente acordado entre el Ejecutivo y los transportistas.
El equipo económico del Gobierno sostendrá hasta el domingo reuniones con distintos sectores relacionados con el mercado de autopartes, medicinas, ropa, calzado y productos de aseo personal para regular los precios.
Al respecto, el ministro de Comunicación indicó en rueda de prensa que estas reuniones se están dando debido a la «buena experiencia» y «muy buenos resultados» que asegura se obtuvieron con las agroindustrias del país -que ya fijaron los precios de 25 alimentos- y el sector transporte.
Más tarde, el jefe de Estado pidió regular los precios de todos los medicamentos, un renglón generalmente escaso en el país.
«Fijar los precios máximos de venta al público de todos los medicamentos del país, actualizados al plan de recuperación económica«, dijo el mandatario durante una asamblea con trabajadores sanitarios que fue transmitida en cadena obligatoria de radio y televisión.
El mandatario pidió a sus ministros coordinar una reunión «esta misma semana» con «todos los empresarios públicos y privados del sector farmacéutico para un plan (…) para tomar decisiones de producción, de importación y de precios».
«Vamos a lograr la soberanía y seguridad farmacéutica y tenemos cómo (…) para ir estabilizando, normalizando, mejorando«, prosiguió.
Maduro pidió también a sus ministros presentar una propuesta para «centralizar la nómina de todo el sector salud» para establecer luego «una tabla salarial unificada».
A su modo de ver, «la agenda del programa de recuperación económica ha arrancado a buen paso».
«Vamos a poner orden a la economía, vamos a una economía humanista, con orden, hemos tomado el primer paso, hemos arrancado esta semana y hemos arrancado bien, le agradezco al pueblo su respaldo«, indicó.
Luego, durante una alocución transmitida vía Facebook, aseguró que tiene «garantizada la entrada de divisas» para este año y el próximo para blindar, según dijo, su paquete de ajustes, con el que busca sacar al país de la severa crisis económica.
Maduro reiteró que aumentará el precio de la gasolina, considerada la más barata del mundo, y que solo las personas que tengan el llamado carnet de la patria y se inscriban en un «censo automotor» podrán gozar de un subsidio que los librará de pagar el combustible a «precios internacionales».
Estas medidas, al igual que el aumento salarial que el Ejecutivo multiplicó por 35, entran en vigor en medio de un escenario de hiperinflación que, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), cerrará el año en 1.000.000 %.
Además, el martes pasado el Banco Central oficializó la devaluación del 95,8 % luego de que la tasa oficial de cambio pasara de 2,49 a 60,00 bolívares soberanos por un dólar estadounidense. EFE
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