Ecuador se convirtió hoy en una parada latinoamericana más de las Nuevas Rutas de la Seda que China planea por todo el planeta, la iniciativa comercial y de infraestructuras estrella del presidente chino, Xi Jinping, que busca una expansión mundial con rostro amable.
Con la firma de un «memorando de entendimiento para la cooperación» sobre la Franja y la Ruta entre el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, y su par chino, el país sudamericano se sumó a este proyecto que cuenta con otros quince adeptos más en la región de América Latina y el Caribe.
El jefe del departamento dedicado a América Latina en el Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Zhao Bentang, confirmó la rúbrica de este y otros acuerdos tras la protocolaria recepción de Xi a Moreno, de visita de Estado en Pekín, en el Gran Palacio del Pueblo de la capital china.
Asimismo, Zhao destacó que se fomentaría la cooperación «en beneficio mutuo» en los ámbitos de «la construcción de infraestructuras, capacidad productiva, agrícola, informática, las nuevas energías y la protección medioambiental».
El funcionario chino apuntó que China pretende «innovar las modalidades de financiación para fomentar el desarrollo» de ambos países, aunque no dio más detalles.
En la actualidad, Ecuador se encuentra inmerso en un proceso de pago de su abultada deuda con China mediante la entrega de millones de barriles de petróleo.
Zhao afirmó que ambas partes «van a esforzarse para defender el multilateralismo y mejorar el sistema de gobernanza global», así como «defender los derechos legítimos de los países en vías de desarrollo», en un momento en el que China protagoniza una amarga rivalidad comercial con EEUU.
Por su parte, Xi aseguró que «la financiación de China a Ecuador no tiene condiciones políticas», al tiempo que mostró su interés en que el país latinoamericano cree «un buen ambiente para los inversores chinos» y que les presente «ofertas interesantes», según la cadena estatal de televisión CCTV.
El mandatario chino apostó por «el intercambio en todos los ámbitos a diferentes niveles».
En este sentido, Pekín y la delegación diplomática y empresarial encabezada por Moreno firmaron un gran número de acuerdos en materias relativas a la prevención y gestión de desastres naturales, intercambios culturales, cooperación policial y judicial, y aviación civil.
Durante el encuentro, Lenín Moreno calificó a China de «amigo sincero» al que agradeció su participación en las labores de reconstrucción tras el terremoto que sacudió Ecuador en 2016 y que causó más de 600 muertos y dejó a miles de personas sin hogar.
Después de la reunión, el líder chino ofreció una cena en honor a Moreno y el resto de la delegación ecuatoriana.
El día comenzó con una ofrenda floral en el Monumento de los Héroes del Pueblo, en la céntrica plaza pequinesa de Tiananmen, y una visita al cercano Museo Nacional de China, a lo que siguió la reunión entre Moreno y Xi en el también aledaño Gran Palacio del Pueblo.
Durante su visita, el presidente ecuatoriano no ha escapado al frío del invierno pequinés y se ha constipado, motivo que le ha llevado a cancelar las entrevistas acordadas para este jueves con la prensa local e internacional, según fuentes de la delegación ecuatoriana.
Moreno lidera desde este martes una delegación diplomática y empresarial en la capital china en una visita oficial que concluirá mañana jueves, cuando está previsto que el mandatario visite el Centro de Desarrollo Tecnológico de Huawei por la mañana.
Varios empleados y becarios ecuatorianos trabajan en la actualidad en esa planta de Huawei, empresa que, según el Gobierno del país sudamericano, «tiene interés en aumentar su inversión en Ecuador«.
En la tarde de mañana jueves está previsto que Moreno se reúna con el primer ministro chino, Li Keqiang, y con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional China (el órgano legislativo), Li Zhanshu, con lo que concluirá la visita a China.
El viaje tiene por objetivo atraer las inversiones chinas al país sudamericano y fomentar las exportaciones ecuatorianas al gigante asiático, además de reforzar las relaciones políticas bilaterales y negociar la deuda de Ecuador con China. EFE