El informático estadounidense Paul Ceglia huyó de su país en 2015 y se radicó en Ecuador tras ser acusado de fraude en el caso que reclamó la mitad de Facebook, debido a que vio similitudes en la lucha de este país contra la petrolera Chevron.
«Estaba inmerso en mi caso legal y vi repetidas citaciones de Chevron contra Ecuador, lo que jugó un enorme rol en mi decisión de venir al país», explicó Ceglia, de 45 años en una entrevista a Efe tras recuperar el martes la libertad después de que el presidente, Lenín Moreno, rechazara su extradición a Estados Unidos.
Supuestos damnificados de una provincia amazónica ecuatoriana demandaron en 2003 a la petrolera estadounidense por lo que describieron como uno de los mayores desastres ecológicos ocasionados por el derramamiento de 80.000 toneladas de crudo entre 1964 y 1992 en la cuenca amazónica ecuatoriana.
La petrolera alegó que efectuó la limpieza de los campos ambientales antes de entregarlos y que la responsable de la contaminación fue la estatal Petroecuador y que el Estado ecuatoriano trataba así de deslindarse de su responsabilidad.
El caso llevó a las partes a un largo litigio en el que un tribunal de arbitraje internacional terminó fallando el año pasado un laudo a favor de Texaco -que adquirió a Chevron-, y determinó que hubo irregularidades en un juicio llevado a cabo en Ecuador contra la petrolera.
Al respecto, Ceglia consideró que «Ecuador estaba siendo tratado de forma atroz por las cortes federales» estadounidenses y que litigaban bajo la misma firma legal que lo hizo Facebook, empleando los «mismos trucos legales».
En su causa contra Facebook y su fundador, Mark Zuckerberg, Ceglia adujo que ambos habrían firmado un contrato en virtud del cual al segundo le correspondería el 84 por ciento de la propiedad de la tecnológica, una documentación aportada que asegura que es auténtica y que la justicia estadounidense desestimó y lo acusó del delito de fraude procesal.
Precisamente Ceglia indica que este tipo de delito ha sido esgrimido en dos ocasiones en la última década por tribunales federales estadounidenses; una en su caso y la otra, el de Chevron.
Detenido el pasado 23 de agosto, el informático fue puesto este martes en libertad después de que Moreno pidiera en un documento al Ministerio del Interior que negara la extradición a Estados Unidos, recordando que la ley establece que esta se conceda preferentemente atendiendo los principios de reciprocidad.
Respecto a la decisión de Moreno de rechazar su extradición, el estadounidense se pregunta: «¿Cómo podría expresar a alguien cuánto lo aprecio por lo que ha hecho y su coraje?».
Y frente a aquellos que le habían asegurado que el presidente ecuatoriano se plegaba a los intereses de Estados Unidos, Ceglia lo defiende tajantemente y confía en que su caso, «sirva de muestra a Ecuador para que pueda ver que este hombre toma las decisiones correctas sin importar su línea política».
En el plano legal ha solicitado el asilo al país andino, donde piensa seguir trabajando el mundo de la tecnología, pero en el ámbito de la inteligencia artificial, y afirma que dedicará toda su vida a retribuir el «regalo» que le ha ofrecido Ecuador. EFE