El primer vicepresidente del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, desestimó este lunes el contenido del nuevo informe sobre el país suramericano presentado por la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, y la acusó de «ensañamiento».
«No nos va a quitar el sueño, no nos vamos a dejar chantajear», aseguró en rueda de prensa Cabello, quien reiteró la tesis oficial de que el informe sobre la situación de los derechos humanos en el país fue elaborado por el enviado especial para Venezuela del presidente Donald Trump, Elliot Abrams, y que, en todo caso, Bachelet «lo firmó».
Indicó que en su momento las autoridades venezolanas refutaron el contenido del primer informe, presentado el pasado mes de julio por la expresidenta chilena.
«No nos afecta mucho, nosotros seguiremos avanzando respetando los derechos humanos porque así lo establece nuestra Constitución», dijo Cabello.
«Contrasta la posición, el ensañamiento de la señora Bachelet contra Venezuela y su actitud por ejemplo con lo que está ocurriendo en su propio país», dijo.
Para Cabello, Bachelet «está posicionada sobre Venezuela, Cuba y Nicaragua«, mientras «no ve» los asesinatos de dirigentes campesinos y políticos en Colombia o la represión contra los estudiantes en Chile.
Sobre la investigación de la revista colombiana Semana que denuncia presuntos nexos entre el mandatario y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las FARC para desestabilizar Colombia, Cabello la consideró «una irresponsabilidad del Gobierno colombiano».
Cabello sostuvo que el Gobierno de Colombia «se cansó de exportar drogas, de exportar cocaína, de producir drogas, ahora quiere exportar guerras».
Acusó al Ejecutivo colombiano de no defender el acuerdo de paz con la guerrilla de la FARC y de querer llevar la guerra «a otros territorios, echándole la culpa a otros países de lo que ellos mismos han generado».
Para Cabello, el objetivo es que el presidente Iván Duque lleve este «expediente» a las Naciones Unidas «para que sus amos del norte sancionen a Venezuela y lo incluyan como país patrocinante del terrorismo».
«No nos provoquen que nosotros no queremos problemas con nadie«, dijo el chavista, quien advirtió que mientras «más nos hagan, más duros nos vamos a poner nosotros».
Venezuela y Colombia pasan por un nuevo pico de tensión diplomática, pues la semana pasada, Maduro anunció que desplegaría un sistema de misiles antiaéreos en la frontera y ordenó ejercicios militares.
En respuesta el presidente colombiano, Iván Duque, dijo que Maduro no debe salir con «bravuconadas» e insistió en que el líder chavista protege a los cabecillas del ELN al igual que a los alias «Iván Márquez», «Jesús Santrich» y otros mandos de la desmovilizadas FARC que abandonaron el proceso de paz colombiano y retomaron las armas.
Las relaciones entre Colombia y Venezuela están rotas desde febrero pasado y la frontera de 2.219 kilómetros es escenario de constantes tensiones que nunca han llegado al enfrentamiento militar. EFE