Juan José Pons
Guayaquil, Ecuador
Nuestro país ha sido sometido a un proceso de inestabilidad política, vandalismo y terrorismo supuestamente motivado por la decisión del gobierno de eliminar el subsidio a la gasolina extra, eco y al diesel lo que, evidentemente, significa un incremento en los costos de transporte y producción pero solo proporcional al incremento del combustible que no es el 100% del costo de producción ni de transporte.
Moreno heredó la economía y la estructura del estado y como continuó endeudándose; ¿qué opciones tenia el gobierno como alternativa a esa medida? Pues tomar medidas más duras como subir el IVA al 15% o despedir al 20% de la burocracia o peor aún seguir aumentando el endeudamiento a tasas muy altas sin generar poder de pago. Es verdad que se demoró en tomar la medida y aún falta la reforma tributaria, así como, la laboral, pero la tomó y es la medida de menor impacto.
De esto se aprovechan los que dejaron el país como está, en complicidad con los contrabandistas de combustibles, los lavadores y ejecutores de la corrupción que, encubiertos en las marchas indígenas que también se aprovechan de esta oportunidad para recuperar su capacidad de movilización y utilizar la reacción como parte de sus luchas internas para captar la dirigencia – hasta hoy difusa-, tratan de paralizar el país y desestabilizar nuestro sistema democrático republicano para volver a la tiranía del socialismo del siglo XXI que oprimió a los mismos indígenas que hoy los encubren en sus marchas.
Sinceridad es definir las cosas por lo que son, y lo que vivimos hoy en el Ecuador no es una reacción a medidas económicas exigiendo compensación o revisión , hay que llamar a las cosas por su nombre, es una TENTATIVA DE GOLPE DE ESTADO para recuperar el poder perdido y gozar de los expolios del estado y de las riquezas mal habidas.
Nos corresponde a todos los ecuatorianos defender nuestra democracia y al gobierno y a la fuerza pública cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes de la República -una, sola e indivisible- con toda la fuerza que la legalidad les da.