El exitoso 2019 del fútbol ecuatoriano

Gonzalo Orellana

Londres, Reino Unido

El 2019 fue el año más exitoso del fútbol ecuatoriano a nivel de clubes, por lo menos si se lo mide por los ingresos generados por sus participaciones internacionales.

Al país ingresaron cerca de US$19 millones por participaciones internacionales de sus clubes. El club que encabeza los ingresos fue Independiente del Valle con su título de campeón de la Sudamericana que significo US$6.58m, esto no incluye el 25% de la taquilla de la final que también le corresponde. Le sigue Liga de Quito con US$5.25 millones por haber llegado a cuartos de final de la Copa Libertadores, después viene Emelec con US$4.05 millones, Universidad Católica con US$1.18 millones, Macara y Delfín con US$680 mil y finalmente Barcelona con US$500 mil.

Esta cantidad es significativa por dos razones: la primera es que representa alrededor de un 20% del presupuesto de los clubes ecuatorianos en 2019 que fue de alrededor de $94 millones. Pero es aún más significativa pues Ecuador es el país que más dinero recibió después de Brasil que se llevó más de US$60 millones, una tercera parte se debe a Flamengo y su título de Libertadores, y Argentina que se llevó algo más de US$40 millones. El resto de los países sudamericanos se llevaron entre US$10 y US$13 millones producto de participaciones menos exitosas que las de clubes ecuatorianos.

Desde este 2019 los premios que reparte Conmebol a sus dos torneos: Libertadores y Sudamericana, se han incrementado considerablemente, llegando a US$211m. Eso junto a una buena participación de los clubes ecuatorianos han hecho que tengamos ingresos récords. En 2020 este récord puede incrementarse aún más, dado que el título de Independiente significa que Ecuador tendrá 3 clubes con pase directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores, así como disputará la Recopa Sudamericana que reparte US$2 millones entre el campeón y el subcampeón.

Suponiendo una participación de los clubes ecuatorianos razonablemente optimista: dos equipos llegando a octavos de final en Libertadores y otros dos en Sudamericana, el ingreso para el fútbol ecuatoriano podría estar entre $20 y $22 millones. Obviamente cualquier desempeño superior a octavos de final, como este año lograron LDU e Independiente significaría un ingreso mayor. El 2021 los ingresos podrían ser aún mayores dada la participación de Independiente en el mundial de clubes.

El fútbol a nivel mundial se ha convertido en una industria millonaria, por ejemplo: el Manchester City acaba de ser valorado en US$4.8 billones, y el presupuesto de los clubes está directamente vinculado a su éxito deportivo. Sin embargo, hay excepciones y Ecuador es una de ellas. El presupuesto del Flamengo que acaba de quedar campeón de la copa Libertadores era de US$112 millones, por el contrario, el presupuesto de Independiente del Valle en 2019 fue de US$5m, es decir una diferencia de 22 veces que deberá enfrentarse en la Recopa, aunque Independiente ya ha enfrentado a rivales considerablemente más ricos pues el Corinthians al que venció en semifinales de la Sudamericana tenía un presupuesto de US$96m, superior al de los 16 equipos ecuatorianos combinado.

El objetivo de la Conmebol al incrementar los premios es reducir la diferencia que hay con el fútbol europeo, sin embargo, están creando otro problema, una enorme brecha entre las dos potencias: Brasil y Argentina y el resto de Sudamérica. Si el Flamengo ya partía con ventaja con sus $112 millones y jugadores traídos de equipos europeos, los US$20m que acaba de ganar solo lo agrandaran más el próximo año cuando tenga que enfrentarse a equipos peruanos, bolivianos o uruguayos que están lejísimos de igualar dichos presupuestos.

La única forma de sobrevivir para el resto de los equipos sudamericanos es ser increíblemente eficientes con sus pequeños presupuestos. Aquí el Independiente del Valle brinda enormes lecciones para todos los clubes de Latinoamérica. La forma más efectiva de invertir el dinero es en divisiones inferiores, pues esos jugadores serán siempre más baratos que intentar traer un jugador importante del exterior como hacen ahora los equipos brasileros y argentinos. Afortunadamente en Ecuador parece que varios equipos pequeños están siguiendo los pasos de IDV y empiezan a desafiar a los grandes de Ecuador y quizás con suerte también empiecen a hacerlo en Sudamérica. Aucas fue el segundo equipo que más jugadores aportaba a la selección sub-20, Macará, Delfín y Universidad Católica llevan años de fortalecimiento institucional y han sido capaces de formar equipos competitivos que vencieron a Barcelona, Emelec y Liga en los playoffs. Es esta fuerte competencia interna la que incrementa el nivel de juego y permite a los clubes ecuatorianos hoy estar por encima de sus pares de Chile, Colombia o Uruguay, países más ricos, grandes o con más tradición en el fútbol que Ecuador.

Como en otros sectores de la economía ecuatoriana, los equipos de fútbol deben mirar hacia afuera para crecer, pues las participaciones internacionales permiten obtener ingresos que son difíciles de igualar con patrocinios locales o asistencia a los estadios, sobre todo para equipos pequeños o con poca hinchada. El 2019 ha sido un año histórico para el fútbol ecuatoriano por varias razones: el éxito de Independiente, el tercer puesto en un mundial sub-20 o ganar el Sudamericano de la misma categoría. Pero además porque equipos medianos y pequeños han empezado a ver cómo el trabajo hecho por dirigentes con visión se materializa en éxitos deportivos e institucionales.

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