Después de cuatro meses de encierro, el confinamiento ha ido aligerándose en algunas ciudades del mundo. El sector económico, social y cultural ha empezado a dar sus primeros pasos hacia lo desconocido: la nueva normalidad o la vida post-COVID. En el caso de la industria de la moda, las firmas han empezado a reabrir sus puertas con este nuevo entendimiento y con un optimista pero largo camino que recorrer.
Desde este año fuimos espectadores de la evolución del pantalón masculino cada vez más y más amplio. Los pantalones tipo tailored han decidido ser nuestro aliado más cómodo pero también nuestra prenda con más estilo. La colección ’21 de Ermenegildo Zegna está invadido por este trend con piezas XL a lo ancho y a lo largo.
Una de las firmas que más sorprendió con su colección fue, sin duda, Prada. Por un lado una colección compuesta por prendas formales, simples y sofisticadas, y por el otro una colección inspirada en prendas sport ultra vanguardista. Las transparencias, los leggings a juego con shorts cortos y parkas -en su mayoría en color blanco- son una apuesta totalmente futurista.
