La Policía de Ecuador incrementó este lunes su capacidad operativa en Guayaquil ante el auge de la delincuencia registrada en las últimas semanas, informó el Ministerio de Gobierno.
El anuncio se realizó tras una reunión entre el titular de la cartera del Interior, Patricio Pazmiño, y la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, donde se destacó la presencia de 500 nuevos agentes para atajar la oleada de delitos en la ciudad.
El contingente policial está integrado por agentes de las unidades especiales de la Policía, especialmente del Grupo de Intervención y Rescate (GIR), el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y el Grupo Especial Móvil Antinarcóticos (GEMA).
El objetivo es «fortalecer la seguridad del puerto principal» del país, que ha sentido en las últimas semanas el impacto de la delincuencia, añadió la fuente.
La alcaldesa Viteri, durante una rueda de prensa, precisó que el municipio de Guayaquil está empeñado en apoyar en las acciones que tiendan a otorgar una mayor seguridad a la ciudad, así como dar seguimiento a las operaciones destinadas a frenar a la delincuencia.
Ese aporte incluirá equipos tecnológicos, vehículos, alimentación e insumos de bioseguridad para que los 500 policías que llegan a la ciudad «lleven a cabo su función de la mejor manera posible», apuntó Viteri.
Precisó que la provisión de todos los insumos para la tarea de reforzamiento de la seguridad en la ciudad, «correrán a cargo de la ciudad de Guayaquil».
Por su parte, el ministro Pazmiño resumió algunos detalles sobre la reunión de un Comité de Seguridad para Guayaquil que busca articular las acciones de «cooperación y de servicios integrales que debe tener la seguridad».
«Uno de los trabajos que hemos hecho es buscar la forma de interconectarnos para juntar todos los elementos necesarios» y, sobre la base de este análisis, «tener un conocimiento que nos permita tomar decisiones y estrategias en beneficio de la ciudad», agregó Pazmiño.
Además destacó la necesidad de la educación a la ciudadanía para disminuir «los factores que favorecen al delito y la violencia», como el consumo de drogas, alcohol y la violencia de género.
También hizo hincapié en las operaciones que prevén ejecutar las Fuerzas Armadas, como el control de armas, municiones y explosivos, con el objetivo de «impactar en los mercados delictuales donde se venden y ofertan productos provenientes de la delincuencia».
Enfatizó en el apoyo que ha ofrecido el Ministerio Público con la designación de tres fiscales permanentes para participar en este tipo de operativos.
Para Pazmiño, se busca que los delitos sean juzgados por las autoridades respectivas, para lo cual se requiere de procedimientos de «inteligencia» y de acciones de la «policía judicial» durante las diferentes operaciones contra la delincuencia.
Las autoridades policiales indicaron que este tipo de estrategias contra el auge de la delincuencia continuarán en Quito, para lo cual se prepara una reunión similar con el alcalde de la capital, Jorge Yunda, para el próximo miércoles.
Recientemente, la alcaldesa de Guayaquil alertó sobre el auge de la delincuencia en su ciudad.
«Lo que está sucediendo en la ciudad es gravísimo en materia delincuencial. La mayoría de las muertes que se han dado, según datos de la Policía Nacional, están relacionadas con sicariato», destacó Viteri al denunciar también de la muerte de un periodista tras un robo y el asalto a una entidad bancaria. EFE