La Unión Europea (UE) consideró este jueves que las elecciones presidenciales de Perú han sido un proceso «libre y democrático» y mostró su confianza en que estas se resolverán dentro de la legalidad vigente.
Así se expresó en un mensaje en las redes sociales la embajada de la UE en el país andino, un texto que contrasta con las afirmaciones de fraude, sin pruebas fehacientes, que esgrime la candidata derechista Keiko Fujimori, que perdió la votación de manera ajustada frente al izquierdista Pedro Castillo.
«Confiamos en las autoridades electorales para la solución de los litigios pendientes dentro de los cauces legales establecidos», apuntó la legación, en referencia a los recursos presentados por Fujimori para anular unos 200.000 votos que la candidata considera fraudulentos.
La UE coincidió así en su posición con la de Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA), que en los días previos han descartado la posibilidad de que haya ocurrido un fraude en los comicios peruanos y felicitaron al país por el correcto desarrollo del proceso electoral.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos aseguró el martes que las elecciones peruanas han sido «un modelo de democracia en la región».
Para el Gobierno estadounidense los comicios peruanos fueron «elecciones libres, justas, accesibles y pacíficas, incluso en el contexto de los inmensos retos que plantea la pandemia de covid-19».
Asimismo, la administración del presidente estadounidense Joe Biden apoyó que los resultados de las elecciones no se publiquen oficialmente hasta que las autoridades electorales no hayan resuelto todos los recursos presentados por ambas partes.
SEGUIMIENTO DE LA OEA CONTINÚA
Por su parte, la OEA, que tuvo la misión de observación electoral más numerosa entre los distintos organismos internacionales que supervisaron los comicios peruanos, ya informó que no hubo irregularidades de gravedad.
En un nuevo comunicado emitido este jueves después de que varios líderes de la derecha peruana reclamaran al presidente interino solicitar a la OEA una auditoría, el organismo internacional informó que continúa haciendo seguimiento al proceso electoral.
La OEA avaló el trabajo de los jurados electorales, que con «decisiones deliberativas, expeditas y públicas» han rechazado en primera instancia todos los recursos presentados por Fujimori para anular votos.
Para el organismo que lidera el uruguayo Luis Almagro, «los procedimientos se han realizado con apego a la ley y a los reglamentos vigentes», con igualdad de condiciones para que ambos partidos presentasen sus reclamos.
Tampoco encontraron evidencias de fraude la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore), la Asociación Civil Transparencia, la Defensoría del Pueblo ni la encuestadora Ipsos, que realizó un análisis de las más de 86.000 actas electorales.
PROCLAMACIÓN RETRASADA
Fujimori lanzó la denuncia de un supuesto «fraude sistemático» al día siguiente de la votación, cuando el escrutinio hacía casi irreversible su tercera derrota consecutiva en una segunda vuelta presidencial tras las vividas en 2011 ante Ollanta Humala y en 2016 frente a Pedro Pablo Kuczynski.
Acto seguido solicitó anular unos 200.000 votos de zonas andinas, rurales y pobres de Perú que votaron de manera abrumadora por Castillo, lo que de momento retrasa la proclamación oficial del presidente electo hasta que todos los recursos que han sido apelados no sean revisados por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
De momento, todos los reclamos revisados en primera y segunda instancia por los jurados electorales han sido declarados infundados.
El principal argumento esgrimido por Fujimori es que había firmas falsas en las actas, así como otras irregularidades que no han podido ser acreditadas porque, entre otros motivos, ningún votante ha denunciado la suplantación de su identidad.
A 100 % del escrutinio, Castillo es el virtual presidente electo de Perú al haber sacado unos 44.000 votos más que Fujimori, en una ajustada votación donde el profesor y líder sindical del magisterio peruano obtuvo el 50,12 % de los votos válidos. La República.