Guayaquil, Ecuador
Desde hace rato el país sufre la arremetida criminal del narcotráfico. Diariamente se informa de crueles asesinatos, de hechos de sangre nunca antes vistos; la proliferación de bandas criminales que tiene atemorizada a la población. El clamor ciudadano es que se tome todas las medidas que sean necesarias para parar estos hechos delictivos. “A grandes males, grandes remedios”.
Podemos estar o no de acuerdo con las medidas tomadas por el presidente de la República de El Salvador Nayib Bukele, frente a la arremetida criminal de las Maras (bandas de jóvenes delincuentes que matan con sevicia), al haber ordenado acciones extremas e inmediatas en contra de esos delincuentes como que los más peligrosos sean confinados a celdas obscuras individuales, reducción en la alimentación, prohibición de visitas, etc. Si bien es cierto el respeto a la vida humana de quien quiera que sea, es uno de los fundamentales derechos y es consustancial al respeto de los Derechos Humanos, pero es justo que quienes no tienen un ápice de respeto a la vida y matan en la forma más cruel, reciban el castigo acorde a su crueldad y que estos sean ejemplarizadoras.
Hasta hace poco, nunca se había visto en nuestro país cadáveres colgados en los puentes como un acto de advertencia y de terror, dirigidos por estas bandas criminales a sus adversarios y a la población; peor aún, la aparición de atentados terroristas a través de “coches bomba”. De estos últimos hechos, la prensa nos informa:
“Un coche bomba explotó esta madrugada en los exteriores de la cárcel ‘La Roca’ en Guayaquil. El hecho se registró la madrugada de este lunes 25 de abril de 2022. No hay víctimas mortales. Días atrás, el Gobierno dispuso el traslado de cabecillas de bandas, como Los Lobos y Los Tiguerones, a este centro carcelario.
Testigos dijeron que dos sujetos abandonaron durante la madrugada el vehículo, que luego explotó, y huyeron en dos motocicletas en las que los esperaban dos cómplices.
El vehículo, un Chevrolet Aveo Family, quedó completamente destruido con varias partes del mismo esparcidas por los alrededores del km 17 1/2 vía a Daule. Los datos de la placa quedaron legibles. El vehículo está registrado en Puerto López, Manabí.
La explosión ha ocurrido después que el viernes, el ministro del Interior Patricio Carrillo fue amenazado de muerte en panfletos con una bandera mexicana, en los que rechazaban la liberación, por hábeas corpus, de alias Junior, el segundo al mando de la banda criminal Los Choneros”.
Las bandas criminales pretenden ponerle contra la pared al Estado. Por nada del mundo el Estado podrá ceder al chantaje, desafíos y agresiones. Es la hora de la unidad nacional para hacerle frente a este peligro; que cada órgano del Estado y la ciudadanía asumamos nuestras responsabilidades con una gran carga de patriotismo.
Si el presidente Guillermo Lasso, junto a los órganos de justicia y Fuerza Pública, toma medidas acorde a las circunstancias, recibirá no sólo el aplauso de los 17 millones de ecuatorianos, sino el total respaldo.
